Mahou-San Miguel destinó 27,6 millones de euros para seguir contando con las instalaciones más punteras del sector que garanticen la máxima eficiencia, calidad, seguridad y respeto al medio ambiente.
Las inversiones realizadas el pasado año se centraron en proyectos dirigidos a incrementar la eficiencia energética y sostenibilidad, a la producción de nuevos productos y formatos, al aseguramiento de la calidad, a la prevención y seguridad laboral, a la optimización logística y a la mejora del servicio al cliente.
Los recursos que el grupo cervecero destinó a sus fábricas en 2010 tuvieron como objetivos la adaptación del proceso para el lanzamiento de nuevos productos y formatos de packaging, la gestión de forma aún más eficiente de sus residuos, la reducción del consumo energético o la automatización de algunos procesos en las áreas de fabricación y almacenaje de sus plantas. La prevención y seguridad laboral, el aseguramiento de la calidad, la renovación de sus laboratorios de I+D o el fomento de la intercambiabilidad entre sus fábricas para así reducir los costes logísticos fueron otras de las metas que se lograron gracias a esta inversión en el área industrial, que ascendió a un total de 27,6 millones de euros.
La fábrica de Mahou-San Miguel ubicada en Alovera ha sido galardonada por la Comisión Europea con el prestigioso premio EMAS 2010 en reconocimiento a la excelencia en la gestión ambiental y el uso eficiente de sus recursos. Además, todas las instalaciones del grupo cuentan con las más prestigiosas certificaciones ambientales como EMAS o ISO 14001 y se someten a la evaluación, control y seguimiento de su actividad según la norma UNE-150008.2008. Poseen también la certificación de calidad ISO 9001 y la certificación OHSAS 18001, la más prestigiosa en cuanto a gestión de la salud y la seguridad en el trabajo.