Según datos del Anuario Socioeconómico’10 del cooperativismo agrario catalán, el volumen de negocio de las cooperativas federadas se sitúa en 1.466 millones de euros, que a pesar del descenso del 1,2% en el número de cooperativas, supone un incremento del 5,6% respecto a los datos del anterior Anuario al 2009.
Son empresas con vocación de continuidad y muy arraigadas en el territorio -un 2,8% de ellas fueron fundadas en el siglo XIX-, ocupan a más de 4.300 trabajadores y aglutinan unos 72.600 socios. Un 97,8% de las cooperativas son pequeñas o medianas empresas. El restante 2,6% son grandes empresas, que suponen el 40,4% del total de la facturación.
En cuanto a los mercados internacionales, el 26% de ellas tienen actividad en comercio exterior con una media de 2 millones de euros por cooperativa, siendo sus principales destinos los países de la Unión Europea, los Estados Unidos y Rusia.
Las sedes se concentran principalmente en las comarcas leridanas, aunque también hay una fuerte presencia en Tarragona y una incidencia importante en Barcelona y Girona. En concreto, el 56,5% de la facturación -unos 824 millones de euros- los aglutinan las 75 cooperativas con actividad en las comarcas de Lleida. Las 75 cooperativas del Camp de Tarragona concentran el 12,9% del volumen de negocio -188 millones de euros- a los que hay que sumar los 154 millones de las 45 cooperativas de las Terres de l’Ebre, el 10,5 % del total. En las comarcas de Barcelona hay 31 cooperativas socias que facturan 198 millones de euros y las de Girona, 21 cooperativas con 102 millones.