El Grupo L´Oréal, en colaboración con diferentes fabricantes de cristal, va un paso más allá en sus esfuerzos de I+D del desarrollo de packaging para, por primera vez en un cosmético, utilizar un vidrio fabricado a través de más de un 40% de material reciclado.
Este cristal reciclado, llamado “cullet”, está fabricado a base de botellas de agua mineral, recolectadas, seleccionadas, trituradas y limpiadas según un proceso validado por L´Oréal. Esto permite obtener un material de aspecto y calidad sin rival en el mercado así como conseguir que se reduzca el impacto medioambiental de los envases de vidrio.
El desarrollo sostenible es el corazón de las políticas de Packaging y Medio Ambiente del Grupo L´Oréal. La dinámica de innovación dentro de la Dirección de Packaging se tradujo en 2009 en el registro de 85 patentes, un incremento del 16% comparado con la media de los últimos 5 años. Esto refleja que el diseño de packaging está pensado para un mínimo impacto medioambiental a través, por ejemplo, de envases de plástico más ligero o papel y cartón obtenidos de bosques gestionados de forma sostenible.
Cada tonelada de Cullet ahorra el equivalente de CO2 generado por 104.525 bombillas tradicionales por hora.
La energía requerida para derretir y crear el llamado “cullet” es inferior a la que se necesitaría para transformar la arena de sílice en cristal. Esto se traduce en la reducción de 380kg de Co2 en la atmósfera por tonelada de cristal reciclado. Esta reducción equivale al ahorro de 17.279 kilos de agua o la energía 104.525 bombillas tradicionales por hora.
Estos resultados se enmarcan dentro del esfuerzo medioambiental general del Grupo L´Oréal que cubre tres objetivos fundamentales a largo plazo para sus fábricas y centros de distribución desde 2005 hasta 2015: reducción en un 50% de las emisiones de gases de efecto invernadero, de agua y de residuos por cada producto acabado.