La industria cárnica ocupa con diferencia el primer lugar de toda la industria española de alimentos y bebidas, representando una cifra de negocio de más de 19.000 millones de euros, un 20% del sector alimentario español, y que exporta por valor de más de 2.500 millones de euros anuales a mercados de todo el mundo.
Estos datos los recoge la Confederación de Organizaciones empresariales del Sector Cárnico de España (Confecarne) que agrupa a la Asociación de Industrias de la Carne de España (AICE) y la Federació Catalana de Industries de la Carn (FECIC), y que cuenta con 1.000 empresas asociadas que emplean a más de 45.000 trabajadores. Las compañías asociadas a Confecarne reúnen el 75% de la producción nacional de elaborados cárnicos, el 79% del jamón curado, más del 90% de la producción nacional de elaborados de cerdo ibérico, el 70% del sacrificio nacional de porcino y más del 60% del sacrificio de vacuno.
La industria cárnica española es uno de los cinco primeros sectores industriales de España. Un sector formado por mataderos, salas de despiece e industrias de elaborados, con un tejido industrial integrado básicamente por más de 3.000 pequeñas y medianas empresas, repartidas por toda la geografía nacional, que
El crecimiento de este sector pasa por el comercio exterior. Para ello, han pedido apoyo al Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino (MARM) para incorporarlas a la Lista Marco de empresas exportadoras, así como la eliminación de las últimas trabas administrativas y documentales que, como el certificado sanitario de exportación, dificultan la actividad exterior de las industrias.
Además, se ha pedido el apoyo en las actividades de promoción, una vez abiertos los mercados de terceros países, fundamental para desarrollar y consolidar las ventas allí, así como la creación de una unidad en el MARM especializada en el apoyo a los proyectos presentados por sectores agroalimentarios españoles a los Reglamentos comunitarios de promoción.