El grupo bodeguero Terras Gauda presenta el primer vino elaborado con caíño blanco, una variedad de uva autóctona con una marcada singularidad y alta calidad, bajo el nombre de La Mar.
Bodegas Terras Gauda realizó una importante apuesta para potenciar la singularidad y diferenciación con el proyecto de I+D+i de recuperación del caíño blanco, una uva cuyo cultivo estaba poco extendido por ser la menos productiva de las variedades blancas. El departamento técnico valoró sus cualidades frente a la productividad y, en la actualidad, el 90% de la superficie plantada de caíño blanco de la D.O. Rías Baixas pertenece a la bodega.
El resultado de esta apuesta por la diferenciación es el vino La Mar, del cual sólo se producen 7.000 botellas.
Además, la bodega lanza La Prohibición, de Bodegas Pittacum perteneciente a la Denominación de Origen Bierzo, elaborado con garnacha tintorera procedente de viñedos centenarios tras un cuidado proceso de cultivo, selección y elaboración.
Siguiendo la filosofía empresarial de elaborar vinos de marcada singularidad y personalidad, la bodega ha apostado por una uva con poca presencia en los vinos de alta gama por la complejidad de su cultivo.
Así, el grupo Terras Gauda introduce en el mercado estos dos nuevos vinos tras la reciente adquisición de Quinta Sardonia, mediante un acuerdo de fusión por canje del 75% de las acciones de esta bodega ubicada en Sardón del Duero (Valladolid) por el 4% de Terras Gauda, que ha asumido el control de la gestión.