Las cifras definitivas sobre la cosecha de cereales 2010/11, publicadas por el Copa-Cogecaarrojan una reducción acusada de la producción por comparación al año pasado.
De cara a la prohibición de exportación de cereales rusos debido a las malas condiciones meteorológicas,¡ resulta crucial aumentar la productividad mediante una Política Agrícola Común (PAC) sólida, dotada de un buen presupuesto.
La situación se ha debatido en el grupo de trabajo «Cereales» del Copa-Cogeca. El nuevo presidente del grupo de trabajo, Ian Backhouse, ha señalado: «Nuestras cifras definitivas demuestran que este año la cosecha de cereales de la UE alcanza los 277 millones de toneladas, lo que supone una reducción de 12 millones de toneladas con respecto al año pasado. Ello se debe principalmente a la variabilidad de las condiciones meteorológicas. Las malas condiciones climáticas también han influido negativamente en la calidad de los cereales en todo el territorio europeo”.
Y añadió: «el año que viene, se espera una estabilización de la superficie de siembra de cereales en la UE por comparación con el año pasado, mientras que se prevé una reducción de las oleaginosas. Además, todavía quedan un millón de hectáreas en las que no se produce, y con un remanente reducido de esta campaña 2010/11, la estabilidad de la próxima campaña 2011/12 quedará comprometida ante las condiciones climáticas del invierno”.
El secretario general del Copa-Cogeca, Pekka Pesonen, ha insistido en que «esta volatilidad extrema del mercado confirma la necesidad de mantener y mejorar las medidas de la UE para gestionar el mercado mediante la PAC, con el fin de aumentar la productividad y garantizar la seguridad del abastecimiento alimentario para nuestros 500 millones de consumidores”.
“Asimismo, el Copa-Cogeca está analizando nuevas medidas para lidiar con la volatilidad del mercado. Además, en el futuro deben mantenerse los pagos directos que reciben los agricultores, para ayudarlos de cara al aumento de la volatilidad del mercado. Finalmente, la PAC debe contar con un buen presupuesto en el futuro, que permita garantizar un sector agrícola dinámico y competitivo en la UE».