La confianza de los consumidores españoles en una pronta recuperación económica se sitúa en la en la zona más baja del mundo con un índice de 65 puntos, frente a los 78 de Europa y los 90 del mundo. Si en el primer trimestre de 2010 la confianza de los consumidores había remontado hasta 79 puntos, actualmente ha alcanzado el mínimo histórico desde que se realiza el estudio índice Global de Confianza de los Consumidores de Nielsen.
El descenso de 4,4 puntos en la última oleada es mucho menor que los 9,6 que había caído en el trimestre anterior.
España se sitúa en la zona más baja de confianza de los consumidores, junto a los franceses, que tienen un índice de 67; y los italianos, con 64. No obstante, todavía es superior al de los vecinos de Portugal, cuyo índice de confianza de 44 es el menor de todos los países incluidos en el estudio, incluso por encima de los 57 de Grecia.
Los internautas españoles creen también que el futuro laboral no presenta buenas perspectivas: un 42% piensa que en los próximos 12 meses no hay buenas posibilidades de trabajo y el 41% las considera directamente malas; por un 13% que las ve buenas, y un 2% que las califica de excelentes. Son datos mucho más negativos que las medias mundiales y europeas. En todo el mundo, el 37% cree que las perspectivas laborales para los próximos 12 meses no son tan buenas y el 15% las considera malas; pero un 36% las ve buenas, y otro 7%, excelentes. Y en Europa, el 24% las ve malas; un 46%, no tan buenas; el 24%, buenas, y el 3% restante, excelentes.
A nivel mundial, la confianza de los consumidores de todo el mundo bajó tres puntos en septiembre, hasta quedar con un índice global de 90. Las esperanzas de los consumidores en una recuperación económica este año se desvanece en la mayor parte del mundo. El índice 90 refleja que los consumidores de todo el mundo siguen siendo en gran medida pesimistas sobre las perspectivas de empleo, finanzas personales y su posibilidad de comprar las cosas que desean y necesitan durante los próximos meses.