La Comisión Europea anuncia planes encaminados a avivar la confianza en el mercado único, con medidas orientadas a impulsar el crecimiento y consolidar los derechos de los ciudadanos.
El mercado único de la Unión Europea constituye la piedra angular de más de 60 años de integración europea. Los obstáculos que, tiempo atrás, impedían el tránsito fluido de bienes y servicios entre Lisboa y Helsinki se han desmantelado. Las empresas cuentan ahora con un mercado de 500 millones de consumidores. Los consumidores que se desplazan al extranjero han sido testigos de la espectacular reducción de las tarifas de telefonía móvil. Con la moneda única, viajar a otros países o comprar en ellos no requiere ahora ningún esfuerzo. Los trabajadores disfrutan de amplios derechos.
Los ciudadanos puede trabajar, estudiar y vivir en cualquier lugar de los 27 Estados miembros de la UE. Ahora bien, aunque estos logros son motivo de orgullo para los europeos, las empresas y los ciudadanos saben también que sigue habiendo trabas para el ejercicio de esos derechos. En dos informes que se publican hoy, la Comisión Europea presenta una serie de soluciones concretas con vistas a impulsar la confianza en el mercado único. En el Informe sobre la ciudadanía de la UE, la Comisión propone medidas orientadas a facilitar a los ciudadanos de la UE el ejercicio de su derecho a casarse, comprar una casa o matricular un coche en otro país de la UE. A fin de impulsar el crecimiento y el progreso social, el Pacto en pro del Mercado único aboga por la adopción de medidas que faciliten la vida a todos los participantes en el mercado: empresas, consumidores y trabajadores.
«La libre circulación es un derecho sumamente apreciado en la Unión Europea. El constante desmantelamiento de las barreras que obstaculizaban la circulación de bienes, servicios y personas ha reportado enormes beneficios a las empresas y a los ciudadanos. Deseo que, a partir de estos logros, sigamos avanzando de modo que todo el mundo –desde los turistas y estudiantes hasta los trabajadores y pequeños empresarios– pueda realmente beneficiarse de un espacio europeo de libertad, seguridad y justicia,» ha declarado Viviane Reding, vicepresidenta de la Comisión Europea y comisaria responsable de Justicia, Derechos Fundamentales y Ciudadanía. “Mi objetivo ahora es cerciorarme de que se eliminen los obstáculos con que los ciudadanos aún se enfrentan a la hora de ejercer sus derechos. Los ciudadanos deben poder viajar, estudiar o instalarse a vivir en otros países sin dificultad, y deben disfrutar de los mismos derechos con independencia del lugar en que estén”.
En palabras, por otra parte, de Michel Barnier, Comisario responsable de Mercado Interior: «Los mercados deben estar al servicio de la economía y de los ciudadanos.. Es esto lo que define a nuestra sociedad. Sin embargo, el mercado único de la UE no está dando todos los frutos que cabría esperar: debe ofrecer más. Los ciudadanos y las empresas, sean grandes o pequeñas, deben encontrar que el mercado único encierra algún atractivo para ellos. Urge actuar, ya que Europa no se puede permitir el desaprovechamiento de este potencial. Por ello se presentan hoy, en relación con el mercado único, 50 propuestas destinadas a mejorar su funcionamiento, que deberán ponerse en práctica de aquí a 2012.».
El primer Informe sobre la ciudadanía de la UE jamás publicado analiza los problemas cotidianos a los que se enfrentan los ciudadanos a la hora de ejercer sus derechos europeos y desarrollar parte de sus vidas más allá de las fronteras nacionales, esto es, cuando viajan, estudian, trabajan, contraen matrimonio o compran una casa o un automóvil en otro país de la UE. El informe contiene 25 medidas que la Comisión se propone adoptar en el transcurso de los próximos tres años a fin de facilitar la vida a los ciudadanos europeos.