Tras recibir la aprobación pertinente por parte de las autoridades europeas de la competencia, las sociedades Ebro y Lactalis firmaron ayer la ejecución del contrato de compraventa del hasta ahora negocio lácteo de Ebro. Desde este momento, el 100% de esta división pasa a ser propiedad de Lactalis, según comunicaron a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
El valor de referencia de la operación es de 630 millones de euros. De éstos, Ebro ingresó ayer un total de 555,2 millones de euros. El resto, efectuados los ajustes oportunos, será cobrado una vez concluida la auditoria de los Estados Financieros del negocio lácteo a 31 de agosto de 2010, prevista para mediados del próximo mes de octubre.
Esta transacción sitúa a Ebro en una excelente posición financiera para iniciar una nueva fase de desarrollo estratégico en la que, a través del crecimiento orgánico e inorgánico, afianzará su condición de líder mundial en el sector del arroz, seguirá avanzando en su objetivo de convertirse en el primer fabricante de pasta del mundo y se convertirá en un referente internacional en el sector meal solutions. Al mismo tiempo, la operación coloca a Ebro como una de las empresas más saneadas del panorama financiero español.
A Puleva, por su parte, la integración en el mayor grupo lácteo europeo le confiere un importante potencial de desarrollo y una magnífica coyuntura para consolidar e incrementar la posición de liderazgo que ya ostenta actualmente en el sector lácteo español.