Según el estudio “Fabricante y distribuidor” de TNS, el barómetro anual sobre la distribución española, en 2009 el consumidor español presenta una baja fidelidad a las marcas. A pesar de que el 46% de los consumidores acostumbra a comprar siempre la misma marca, un 51% compraría otra marca si al acudir a su tienda no encontrara la habitual.
Casi la mitad de encuestados declara comprar siempre la misma marca.
Un 46% de los consumidores encuestados dice ser fiel a la misma marca aunque esta afiliación varía según la categoría. La tendencia a adquirir siempre una misma marca se incrementa en categorías como el cacao soluble (72% compran siempre la misma marca), pañales (69%) y café soluble (67%).
Frente a los consumidores más fieles encontramos a aquellos que declaran no tener ninguna preferencia respecto a las marcas que consumen, un pequeño porcentaje del total (16.3%). Sin embargo, esta indiferencia hacia la marca elegida también varía dependiendo de las categorías: por ejemplo un 43 % de los encuestados declara no tener ninguna marca favorita cuando hablamos de caramelos y golosinas. Encontramos porcentajes también superiores a la media en otras categorías como utensilios de limpieza (33.1%) y bollería y pastelería industrial (35.8%), productos en los que la marca parece no tener gran relevancia.
La aparente fidelidad por la marca queda desmentida sin embargo por el elevado porcentaje de consumidores que al no encontrarla en el lineal comprarán otra. Más de un 50% de los encuestados declaran que buscarán una marca sustitutiva en caso de no encontrar la habitual en la tienda. Esto ocurrirá sobre todo en productos con un bajo nivel de fidelidad, como los utensilios de limpieza, la bollería industrial o los caramelos y golosinas (casi 7 de cada 10 consumidores elegirán otra marca al no encontrar la habitual).