El ICC del mes de junio se sitúa en 102,3 puntos, 5,4 puntos por encima del dato del mes anterior. Este notable avance del índice se debe a la evolución positiva de sus dos componentes: así, el índice de situación actual crece en 6,7 puntos y en la valoración de las expectativas se observa un aumento ligeramente menor, 4,2 puntos. De esta forma, el ICC vuelve a situarse en valores muy similares a los registrados en el primer semestre de 2018.
Sin embargo, en relación con el mes de junio del pasado año la evolución es muy diferente. El ICC desciende desde junio del pasado año 4,7 puntos, con una pérdida en términos absolutos para la valoración de la situación actual de -6 puntos, mientras que las expectativas ofrecen un descenso menos acusado de -3,4 puntos. En términos porcentuales el perfil de la evolución registrada es muy parecido: el ICC baja un 4,6% como resultado de una pérdida del 6,3% en la valoración de la situación actual y una caída del 3,1% en las expectativas.
La evolución trimestral es positiva en el corto plazo y claramente negativa en términos anuales: el ICC del segundo trimestre de este año sube 4,1 puntos respecto al registrado en el trimestre anterior, un 4,4% en tasa trimestral. Este aumento se debe tanto al crecimiento de 3,6 puntos del índice de expectativas como al avance de 4,7 puntos del índice de situación actual. En relación al segundo trimestre del pasado año 2018 los datos actuales suponen un descenso del 2,8% en el ICC, un 2,8% también en tasa trimestral interanual, como resultado de los descensos del 4,2% en la situación actual y del 1,5% en las expectativas.
El índice de valoración de la situación actual alcanza en junio los 96 puntos, con un aumento de 6,7 puntos con relación al obtenido el pasado mes de mayo. Esta evolución del índice es el resultado de un comportamiento muy positivo en la valoración de todos sus componentes; así, la evolución general de la economía aumenta 7,8 puntos, la valoración del mercado de trabajo avanza hasta 8,3 puntos, mientras que la percepción de la situación de los hogares crece en 3,9 puntos.
En relación con los datos de junio de 2018 la evolución es más heterogénea, negativa respecto a la situación económica y del empleo y positiva en relación a la situación de los hogares. La valoración de la situación económica del país es hoy 12,1 puntos inferior a la de hace un año, las opciones que ofrece el mercado de trabajo se valoran 10 puntos por debajo del valor de hace un año, mientras que la situación en los hogares mejora en 4,1 puntos en los últimos doce meses.
El índice de expectativas llega en este mes a los 108,6 puntos, un aumento de 4,2 puntos, un 4 en porcentaje, respecto al mes precedente. La evolución de sus tres componentes es positiva, aunque ofrece diferencias de intensidad. Así, las expectativas sobre la situación futura de la economía crecen 6,7 puntos, mientras que las relativas al mercado de trabajo ofrecen un incremento menor de 2,2 puntos y las expectativas respecto a la evolución de los hogares se sitúan en una ganancia de 3,7 puntos.
En términos interanuales, los datos de expectativas vuelven a mostrar una evolución negativa para la evolución de la economía y en relación al empleo y claramente favorables respecto a la evolución de los hogares. Desde junio del pasado año, las expectativas respecto a la situación económica del país han descendido en 7,5 puntos, mientras que las referidas al futuro del empleo descienden en 8 puntos. Por su parte, las expectativas de los hogares suben 5,4 puntos. En porcentaje, las expectativas respecto de la situación económica general caen un 6,5%, las referidas al empleo pierden un 7,1% y las de los hogares aumentan un 5%.
Así, la valoración de las expectativas respecto de la situación económica crece un 6,8% con relación al primer trimestre de este año. En ese mismo periodo las expectativas respecto a la evolución del mercado de trabajo aumentan otro 6,8%, mientras que en el caso de la situación futura de los hogares se produce un descenso del 2,2%. En relación al mismo trimestre de 2018 la evolución es negativa: -5,5% para las expectativas sobre la economía, -2,7% en relación al mercado de trabajo y mejoran las expectativas en referencia a la situación de los hogares, +3,9%.