La Comisión Europea ha pedido a los Estados miembros que aprovechen el potencial de las nuevas tecnologías y la digitalización en la agricultura, con el objetivo de mejorar la sostenibilidad y la competitividad del sector, al tiempo que simplifican el trabajo diario de los agricultores.
“Esto será necesario para lograr los objetivos establecidos por la política agrícola común (PAC) actual y futura, ha destacado Bruselas.
Tras la declaración de "Un futuro digital inteligente y sostenible para la agricultura europea y las zonas rurales", firmada por la mayoría de los Estados miembros en abril, la Comisión se reunió con los Estados miembros para presentar y discutir las nuevas tecnologías y la digitalización en la agricultura, destacando las ventajas y los beneficios oportunidades que ofrece para el sector. A través de la PAC, la Comisión pretende facilitar su desarrollo a nivel nacional y regional.
La innovación y el uso de nuevas tecnologías ofrecen soluciones positivas en la agricultura. Esto significa combinar beneficios para el medio ambiente y el clima al tiempo que aumenta la eficiencia y la competitividad, destaca la Comisión, que añade que, sin embargo, “la adopción de nuevas tecnologías sigue estando muy por debajo de las expectativas y varía de un país a otro. Esta brecha debe abordarse para garantizar que todos, incluidos los pequeños y medianos agricultores, puedan acceder a la tecnología y beneficiarse de ella”.
En palabras de Jerzy Plewa, director general de Agricultura y Desarrollo Rural de la Comisión, “los principales desafíos están frente a nosotros. La Comisión ha propuesto una futura PAC con mayor ambición ambiental y climática y, al mismo tiempo, un marco político simplificado en un entorno presupuestario más restringido. Las discusiones en el Consejo y el Parlamento Europeo ya han puesto de relieve esta tensión: ¡debemos hacer más con menos! Estoy convencido de que podemos lograr esto solo si todos abrazamos el potencial de las nuevas tecnologías”.
Las propuestas de la PAC posteriores a 2020 también tienen en cuenta la importancia del uso de las nuevas tecnologías en el sector. Así, por ejemplo, incluye el uso obligatorio de la Herramienta de sostenibilidad de la granja para nutrientes (FaST) por parte de los beneficiarios de la ayuda a los ingresos. Esta herramienta tiene como objetivo facilitar un uso sostenible de los fertilizantes para todos los agricultores de la UE al tiempo que aumenta la digitalización del sector agrícola.
“La utilización de nuevas tecnologías y la innovación en las zonas rurales y en el sector agroalimentario será necesaria para garantizar una respuesta adecuada a los desafíos actuales, como el aumento de las condiciones climáticas extremas, alimentar a una población en crecimiento y garantizar una renovación generacional del sector agrícola”, concluye Bruselas.