Las organizaciones agrarias Asaja, Coag y Upa han confirmado este viernes “una unidad de acción firme en la búsqueda de soluciones definitivas a la grave crisis de bajos precios que atraviesa el sector olivarero”.
Así, los responsables de las tres organizaciones han comparecido en rueda de prensa para informar del acuerdo alcanzado, que se cierra en un compromiso para poner freno a esta tendencia. Las estructuras a nivel nacional y regional ya se han puesto a trabajar y ahora las organizaciones se marcan mediados de mayo como fecha “para que las administraciones pongan en marcha todos los mecanismos que se encuentran a su alcance para que haya una estabilidad real en el mercado”.
El primer mensaje que han lanzado es que “no van a cejar en el empleo de cumplir un objetivo final: la estabilidad de los precios del aceite”. Más allá de las formas, lo que tienen muy claro las tres organizaciones es que “ya ha pasado suficiente tiempo para que todas las administraciones se pongan a trabajar en esa estabilización de los precios, porque los agricultores jiennenses no puede seguir pendientes de que el precio lo fije el cielo dependiendo de si tenemos una sequía después de una cosecha grande”.
Se trata de un acuerdo para trabajar en resolver esta situación de una forma definitiva, porque las tres organizaciones entienden que “el mercado no funciona” y, por lo tanto, se tienen que poner en marcha medidas básicas y que no se están utilizando correctamente, para que el sector deje de perder dinero absurdamente. Asimismo, han afirmado que “son conscientes de que los agricultores, que es el eslabón más débil de la cadena, sufren un descenso de precios del 35%, mientras que en los lineales el precio del aceite de oliva permanece prácticamente en el mismo nivel que el año pasado”.
Por ese motivo, reclaman la extensión de norma de la Interprofesional que permita la autorregulación del mercado; que en la nueva PAC queden perfectamente actualizados los umbrales de precios y regulada la ayuda al almacenamiento privado y cualquier otro sistema que sirva para regular cosechas de mayor producción en favor de aquellas con menos aceite; que la Ley de la Cadena funcione y cumpla el objetivo con el que se aprobó, “que no es otro que evitar los desequilibrios entre los actores”.
“De cumplirse el plazo y no tener respuestas satisfactorias por parte de las administraciones, las tres organizaciones establecerán nuevas medidas que consideren oportunas, sin descartar la posibilidad de las movilizaciones”, han añadido.