El índice de Confianza del Consumidor (ICC) del mes de marzo se sitúa en 93,9 puntos, 2,3 puntos por debajo del dato del mes anterior. Este descenso se debe tanto a la caída de 2,9 puntos en la valoración de las expectativas como al retroceso de 1,6 puntos en la valoración de la situación actual.
Así, el ICC continúa en valores muy similares a los registrados en el segundo semestre de 2018 e inferiores a los registrados en los dos años precedentes.
En relación con el mes de marzo del pasado año el retroceso es significativo. El ICC desciende desde marzo del pasado año 4,8 puntos, con una perdida en términos absolutos para la valoración de la situación actual de -4,9 puntos, mientras que las expectativas ofrecen un descenso similar, -4,6 puntos. En términos porcentuales el perfil de la evolución registrada es muy parecido: el ICC baja un 5,1% como resultado de una pérdida del 5,8% en la valoración de la situación actual y del 4,5% en las expectativas.
La evolución trimestral es positiva en el corto plazo y claramente negativa en términos anuales: el ICC del primer trimestre de este año sube 2,8 puntos respecto al registrado en el trimestre anterior, un 3% en tasa trimestral. Este aumento se debe tanto al crecimiento de 3,3 puntos del índice de expectativas como al avance de 2,4 puntos del índice de situación actual. En relación al primer trimestre del pasado año 2018 los datos actuales suponen un descenso del 5,6% en el ICC, un 5,5% en tasa trimestral interanual, como resultado de los descensos del 5,3% en la situación actual y del 5,9% en las expectativas.
El índice de valoración de la situación actual alcanza en marzo los 85,2 puntos, con un descenso de 1,6 puntos con relación al obtenido el pasado mes de febrero. Esta evolución del índice es el resultado de un comportamiento negativo de la valoración de la evolución general de la economía (-3,2 puntos) y de la negativa percepción de la situación de los hogares (-2 puntos), mientras que la valoración del mercado de trabajo permanece estable, con una ligera subida de 0,4 puntos.
En relación con los datos de marzo de 2018 la evolución es más heterogénea, negativa respecto a la situación económica y del empleo y positiva en relación a la situación de los hogares. La valoración de la situación económica del país es 12 puntos inferior a la de hace un año, las opciones que ofrece el mercado de trabajo se valoran hoy 8 puntos por debajo del valor de hace un año, mientras que la situación en los hogares mejora en 5,3 puntos en los últimos doce meses.
La evolución trimestral de este índice vuelve a mostrar unos resultados muy diferentes en función del plazo de referencia, en general son negativos en términos anuales y positivos en el corto plazo. Así, la valoración de la situación económica retrocede un 15,1% respecto al primer trimestre del año 2018 y las valoraciones del mercado de trabajo descienden un 9,8% en ese mismo periodo. Sin embargo, en relación al trimestre anterior la evolución es positiva: el índice de situación actual de la economía crece un 1,6% y la valoración del mercado de trabajo aumenta un 3,3% en los últimos 90 días. Por su parte, la evolución de la situación de los hogares es positiva, tanto en su comparación con el primer trimestre de 2018 (+6,2%) como en relación al trimestre anterior, +3,2%. (
El índice de expectativas llega en este mes a los 102,6 puntos, un descenso de 2,9 puntos, 2,7 en porcentaje, respecto al mes precedente. La evolución de sus tres componentes es negativa, aunque vuelve a ofrecer diferencias significativas. Así, las expectativas sobre la situación futura de la economía descienden 4,5 puntos, mientras que las relativas al mercado de trabajo ofrecen una caída limitada a 1,6 puntos y las expectativas respecto a la evolución de los hogares se sitúan en un punto intermedio con una pérdida de 2,6 puntos.
En términos interanuales, los datos de expectativas vuelven a mostrar una evolución muy negativa para el empleo y la evolución de la economía, pero son positivos respecto a la evolución de los hogares. Desde marzo del pasado año, las expectativas respecto a la situación económica del país han descendido en 8,2 puntos y las referidas al futuro del empleo en 10,1 puntos. Por su parte, las expectativas de los hogares suben 4,5 puntos. En porcentaje, las expectativas respecto de la situación económica general y las referidas al empleo caen en el último año un 7,7% y un 9,3%, respectivamente, mientras que las de los hogares aumentan un 4,2%.