La simplificación de las rutinas de belleza también ha generado cambios en los canales de compra a los que acceden los clientes, que buscan comodidad y practicidad para rentabilizar su tiempo. Así, el 42% del gasto de la mujer en belleza se realiza en supermercados, hipermercados o discounts (canal dinámico) y el 5,9% en internet.
Así se ha revelado durante el encuentro este miércoles en Madrid organizado por Lidl para presentar su nueva gama de productos cosméticos y en el que ha reunido a un grupo de mujeres profesionales del sector de la belleza desde distintas disciplinas para desgranar los últimos datos sobre el consumo de belleza en el canal de distribución, así como en el digital.
A este respecto, Rosa Pilar López, directora de Beauty y Fashion de Kantar Worldpanel, ha señalado que “nos enfrentamos a un sector que no logra consolidar su recuperación en el mercado. Pese a que su caída de valor es menor que el año anterior, en 2018 la belleza disminuye un 0,4%. Esta realidad se explica en parte por una simplificación de las rutinas de belleza e higiene, las mujeres usan de media 12,7 productos de cosmética a la semana y los hombres 6,8”.
López da una de las claves para entender este cambio de tendencia y señala que “la crisis influyó en los hábitos de cuidado personal de los españoles, pero también los nuevos estilos de vida y la falta de tiempo hacen que busquemos sencillez y comodidad en nuestras rutinas de higiene”.
Esta tendencia ha beneficiado a productos que aportan conveniencia y multibeneficio como son las aguas micelares o las cremas BB o CC. Estas aguas de limpieza facial son compradas por más de medio millón de individuos (x6 desde 2013) y a su vez las cremas hidratantes con color han crecido un 51% desde 2013 y ya son compradas por casi dos millones de españoles.
Según añade López, “qué productos usamos y cómo, condiciona la compra y la evolución del sector, por lo que entender bien qué y quién hay detrás de cada rutina es crucial para adelantarse a las tendencias que vienen. Así, por ejemplo, ante el envejecimiento de la población, un consumidor cada vez más adulto y más constante en sus cuidados, por su mayor preocupación por su salud y su aspecto, se convertirá en un target clave para la mayoría de las categorías”.
A ello, se une, que según el estudio de Kantar Worldpanel, el 49,3% de las consumidoras ya opina que el precio es más importante que la marca en este tipo de productos. Además, el 47,4% confiesa seguir una rutina de cuidado personal, el 73,8% prefiere apostar por un aspecto natural. Una de las consecuencias de esta tendencia es que una de cada tres considera que tiene poco tiempo para cuidarse, cifra que sigue aumentado en referencia al año anterior.
Son mujeres preparadas y ultra informadas, tienen el poder de comparar y valorar libremente en qué desean invertir su tiempo y dinero, eligiendo siempre la opción que mejor se adapte a su rápido ritmo de vida y le permita liberar tiempo.
Así, el 51,4% de las mujeres se informa antes de comprar sus cremas de belleza y una de cada tres mujeres afirman haber basado esa decisión de compra tras visualizar un video tutorial, así lo revela el reciente estudio “The Beauty Ecosystem”, realizado por Google EMEA en 2018, sobre el consumo de contenidos de la belleza en el entorno digital y en el canal social Youtube en particular. Del mismo se extrae que la cosmética obtuvo en 2018 alrededor de 99 billones de visualizaciones en este canal, tasa que superó en un 82% a la del año 2017, convirtiéndose en la segunda categoría de mayor consumo digital, por delante de gaming, alimentación y moda, solo superada por la música.