Internet se está convirtiendo en uno de los principales canales de venta de productos para el hogar. De hecho, seis de cada diez compradores online en España se han hecho con al menos unos de estos artículos en los últimos tres años.
Así lo revelan datos de Privalia y recogidos por Amazing, consultora de Amazon Centric, que añade que el pasado Black Friday los usuarios españoles compraron más de 800.000 artículos para el hogar en el gigante del comercio electrónico, una cifra muy superior a los 500.000 dispositivos móviles y accesorios de telefonía adquiridos en ese mismo periodo, según sus propios datos.
Con motivo de la celebración este viernes del Día Mundial de los Derechos del Consumidor, Amazing ha analizado cinco derechos de los consumidores que las marcas deben tener en cuenta antes de vender cualquier artículo también por Internet.
Asía, ante desperfectos o roturas, señala que los consumidores pueden efectuar su derecho de desistimiento y exigir su devolución en un plazo de 14 días naturales desde la fecha entrega. El mismo plazo en el que la empresa debe de devolver el dinero abonado. Es más, si el vendedor no informa sobre el plazo de devolución en el momento de la compra, éste se ampliará a 12 meses.
A la hora de hablar de la garantía del artículo, la consultora destaca que funciona del mismo modo que con los productos adquiridos en la tienda física, por lo que el vendedor debe ofrecer un mínimo de dos años de garantía desde la fecha de entrega.
En cuanto a la identificación, Amazing recuerda que al igual que sucede con una tienda física, conocer al vendedor/marca es fundamental para el consumidor. Además, la Ley General para la defensa de consumidores y usuarios, obliga a las marcas que venden sus productos online a identificarse con datos como la domiciliación social, contacto y CIF.
Respecto a los gastos de envío, afirma que “son un auténtico quebradero de cabeza para las empresas con negocio en Internet”. En este sentido, recuerda que las marcas online tienen que detallar los gastos de envío, los plazos de entrega y demás condiciones en el momento de la compra.
Por último, destaca que las empresas tienen que ofrecer una plataforma web totalmente segura para el cliente. No solo deben incluir los métodos de pago más seguros (normalmente suelen ser contra reembolso, Paypal o tarjetas de crédito), ya que tienen que comprometerse a no compartir ningún dato personal y a blindar sus webs con un certificado de seguridad https.
“Los consumidores están cada vez más concienciados de sus derechos online y las marcas no pueden quedarse atrás”, asevera Mariví Hernández-Ros, directora de operaciones de Amazing, quien añade que “no obstante, a muchas empresas que acaban de entrar en el complicado ecosistema de Amazon les resulta complicado controlar al 100% todos los requisitos, no solo legales, sino aquellos orientados a mejorar su presencia en este gigante del comercio electrónico. Ante ello, un buen asesoramiento en vital”.