Hacer la compra en Lidl fue más barato en 2018. En concreto, mientras que los precios crecieron un 3,4% de media en el sector según datos de la consultora Nielsen, en la cadena de supermercados alemana la cesta de la compra se incrementó tan solo un 0,8%, 2,6 puntos porcentuales menos.
Esta cifra supuso un ahorro de 89 millones de euros para el conjunto de sus clientes en España. Teniendo en cuenta su cuota en el mercado español (4,8%), Lidl ofrece a sus clientes un ahorro significativamente superior al de otras cadenas de supermercados, reforzando así el posicionamiento de la cadena como el súper más barato y contribuyendo de forma significativa al ahorro de las familias españolas.
Además, tal y como recuerda la compañía, se ha propuesto “convertirse en la cadena de supermercados de referencia en materia de sostenibilidad en España”. Para ello en los últimos tiempos ha realizado importantes inversiones en proyectos que están impulsando cambios hacia hábitos de consumo más sostenibles y hacia prácticas más responsables: la eliminación de las bolsas de plástico para la compra o de los huevos de gallinas enjauladas, la apuesta por la leche fresca de pastoreo y de bienestar animal, o el impulso a su surtido BIO.
En su compromiso con la alimentación saludable, Lidl continuó apostando en 2018 por los productos frescos y de origen español. Mientras en el resto del sector se incrementaron un 4,8% de media, según Nielsen, Lidl mantuvo los precios de los frescos un 3,8 puntos porcentuales menos que la media del sector, con un incremento del 0,9%, por debajo del IPC anual (1,2%).
“Esta diferencia en los precios de los artículos de frescura tiene un impacto muy significativo en el ahorro de las familias, ya que son los productos más consumidos y los que más peso tienen en la cesta de la compra”, destaca la compañía.
Como consecuencia, los clientes que en 2018 optaron por comprar en Lidl obtuvieron ahorros significativos en todas las familias de frescos. En concreto, los clientes de la distribuidora alemana pudieron comprar las frutas y las verduras un 8,5% y un 6,1% más barato y ahorrar igualmente en la compra de carne fresca (3%), pescado fresco (3,6%), huevos (7,56%) y pan (3,27%).