Alimerka da un paso en busca del bienestar animal, incorporando los huevos ecológicos dentro de su surtido de productos. Estos huevos provienen de gallinas criadas en los campos de La Braña, en Castrillón, dónde crecen con total libertad de movimiento al estar, en todo momento, fuera de jaulas que limiten su actividad física.
Estas aves, explica la compañía, se alimentan de verdura y del fruto de los árboles que las rodean, por lo que su alimentación está siempre basada en alimentos procedentes de la agricultura ecológica.
El grado de bienestar en que estas gallinas son criadas, unido a su alimentación, da como resultado que los huevos que producen estén tipificados como ecológicos, adquiriendo el código 0 en el etiquetado marcado por la Unión Europea.
Al apostar por este tipo de productos, la cadena de supermercados contribuye no solo procurar el bienestar animal, sino también a “reforzar la supervivencia del campo asturiano. Este compromiso por un mundo rural sostenible revierte en los consumidores, ya que podrán volver a disfrutar del sabor auténtico de los huevos de siempre, los de casa”, ha destacado la compañía.