El presidente cántabro, Miguel ángel Revilla ha visitado este miércoles la visita la fábrica Andía Lácteos, en Renedo de Piélagos, para conocer la nueva máquina embotelladora subvencionada por el Gobierno cántabro, "la más moderna" del mercado.
El presidente ha conocido los planes futuros de esta planta que transforma el 30% de la leche de Cantabria y trabaja fundamentalmente para el grupo Mercadona, que distribuye el producto por toda España a través de la marca Hacendado. Asimismo, ha valorado que esta empresa paga el litro "por encima de la media", así como su importancia para el empleo de la zona, ya que genera cerca de 1.200 puestos de trabajo directos e indirectos.
El jefe del Ejecutivo vislumbra un "buen horizonte" de actividad para Andía Lácteos y, en este sentido, ha ofrecido la colaboración del Gobierno de Cantabria para continuar con el proceso de transformación que inició hace unos años y que ha dado lugar a una "transformación muy positiva". Igualmente, ha expresado su apoyo al conjunto del sector agroalimentario, del que ha señalado su pujanza e importancia en la economía regional.
Revilla ha estado acompañado en la visita por el consejero de Medio Rural, Pesca y Alimentación, Jesús Oria, y responsables de la empresa, encabezados por el presidente de Iparlat, Joxe Urrestarazu, además de su director general, José Luis Orbaiz, y el director de la planta de Andia Lácteos, Pablo Pereda.
José Luis Orbaiz ha reiterado el compromiso de Iparlat con el empleo y el sector agroalimentario regional y ha explicado que la nueva máquina embotelladora permitirá a la planta llegar al mercado con productos "punteros" que hasta ahora no ofrecía, como la leche sin lactosa en botella, y aportará "mayor calidad e imagen" en el funcionamiento del producto en los lineales de los supermercados.
El director general de Iparlat confía en mantener el crecimiento del 10-15% de los últimos años hasta llegar a colmatar el máximo rendimiento de una planta que el pasado año procesó 140 millones de litros de leche.
En los últimos años, las inversiones empresariales en la factoría de Piélagos, apoyadas por el Ejecutivo cántabro, se han centrado en la dotación de equipos de elaboración de leche sin lactosa; una nueva línea de UHT con envase aséptico; la modernización de otra línea de esterilizado continuo y la mejora de las condiciones de ventilación y climatización de la fábrica.
La inversión privada en la fábrica de Renedo ha superado en total los 16 millones de euros, de los que tres millones de euros han sido ayudas públicas del Gobierno de Cantabria para facilitar la transformación tecnológica de la planta.