Desde que lanzara en septiembre su leche fresca doblemente certificada en bienestar animal y pastoreo, Lidl ha incrementado en un 30% las ventas de esta línea de productos, liderando de este modo el aumento del consumo de leche fresca en España, que creció un 17,4% en 2018, según datos de Kantar.
De este modo, la compañía se felicita por seguir “dando pasos para liderar el consumo sostenible en España” y mantiene su apuesta por el bienestar animal, lo que está teniendo una gran acogida entre sus clientes ya que el pasado año, uno de cada 10 hogares españoles compraron leche fresca y de ellos, la mitad lo hicieron en Lidl.
De este modo, la cadena continúa incrementando su cuota de mercado en el sector de la leche fresca que, según Kantar, ya alcanza el 14,9% (un 2% más desde septiembre), triplicando su cuota en el mercado global de la distribución (4,8%).
Además, la cadena de supermercados resalta que el incremento del 17,4% en las ventas de leche fresca "contribuye significativamente a frenar la caída del consumo de leche en España, que en los últimos tres años ha caído en torno al 6%".
Asimismo, el proyecto de la cadena de supermercados alemana también contribuye a la sostenibilidad del medio rural español, que como resultado de la industrialización y concentración del sector, el número de granjas tradicionales se ha venido reduciendo un 75% en los últimos años. Impulsando la leche fresca de pastoreo, Lidl contribuye a poner en valor la producción de estas granjas, pues el valor añadido del producto repercute en unos mayores ingresos para el ganadero y asegura la rentabilidad de sus granjas, explica.
Toda la leche fresca que Lidl comercializa en España proviene actualmente de más de 100 pequeñas granjas familiares en Galicia, que ya cuentan con esta doble certificación y en 2019 ampliará su colaboración en un 50% hasta las 150 granjas.