En 2018, el mercado de gran consumo registra la primera caída en la demanda desde que el mercado se recuperara en 2105. El incremento de los precios, en un 3,4%, el estancamiento poblacional y una climatología adversa son factores que no han ayudado a mantener una evolución favorable.
De este modo, según la “Radiografía del gran consumo en España en 2018”, presentada por la consultora Nielsen, los españoles llenaron un 0,7% menos la cesta de la compra durante el pasado año.
No obstante, el incremento de precios que ha propiciado esta caída en la demanda ha impulsado al mercado de gran consumo en valor. Así, en 2018, este mercado ha crecido un 2,6% hasta los 82.000 millones de euros.
Esta tendencia supone un cambio frente al año pasado, ya que los consumidores compraron un poco menos por mucho más, frente al más por más que se experimentó en 2017, donde creció tanto la demanda como el precio.
Los productos frescos, que suponen una tercera parte del gasto en la cesta de la compra, han crecido un 2,5% en valor, mientras que caen un 2,1% en volumen, con un precio superior al año pasado en un 4,8%.
Destaca la caída en volumen de casi todas las categorías, excepto los huevos (2%) y carnes (0,4%). En valor, en cambio, crecen todas las categorías menos el pescado (-4,7%) y el pan (-1%). Las subidas en precios más notables se han registrado en frutas (9,3%) y en huevos (7,6%).
A la hora de comprar esta categoría, los españoles se decantan por los supermercados e hipermercados debido a “la clara apuesta de estos formatos por los productos frescos”, asegura Ricardo Alcón, responsable de Nuevos Mercados de Nielsen. De hecho, el 56% del gasto en frescos se hace en la moderna distribución frente al 44% que se realiza en la tienda tradicional. Esto supone para el primero un incremento en su cuota de 1,5 puntos porcentuales con respecto a 2017.
En cuanto a los envasados, los datos de Nielsen revelan una demanda estable. Por grandes familias, la única que registró un descenso fue la de bebidas, con un 1,7% menos, debido a la climatología adversa que se registró en 2018, un año en el que la primavera y el verano han sido de los más lluviosos.
Dentro de este segmento, todas las categorías registran pérdidas excepto el agua, que responde a la tendencia actual de productos saludables. En concreto, los vinos son los que más caen, con un 4,4% menos, seguido de los refrescos (-4,3%) y los zumos (1,8%). El agua, en cambio, crece un 0,8%.
Sin embargo, “a pesar de beber menos, bebemos mejor. Principalmente en el vino, cuyo consumo cae un 4,4% a un precio un 11,1% más caro debido a que los españoles están premiumizando el consumo de esta bebida en casa, apostando por vinos mejores con Denominación de Origen”, ha explicado Alcón. Además, se consume de forma diferente, desplazándose el consumo de la noche al día.
Crecimiento de la marca de distribución
El 42% de los españoles cuenta con un presupuesto ajustado para la compra diaria y un 56% se esfuerza por hacer la compra al precio más bajo posible. Además, hay un 64% de los españoles que aprovecha las ofertas o promociones en los productos que compra habitualmente.
No obstante, las promociones perdieron peso el año pasado y representa dos de cada 10 euros gastados sobre el total del mercado, aseguran desde la consultora. Se desarrollan más promociones en el segmento de la perfumería e higiene (34%) que en alimentación (22%).
La marca de la distribución gana terreno gracias a esta tendencia hacia los precios más bajos. Con un crecimiento de cinco décimas con respecto al año pasado, alcanza una cuota de participación del 39,4%.
A la hora de comprar, el gran supermercado es el canal más dinámico con más de 4.000 puntos de venta en 2018, de las cuales 160 son nuevas aperturas. Junto con los hipermercados, el incremento en superficie comercial en 2018 ha sido del 1,3%.
En cuanto al canal online, el responsable del estudio revela que “cada vez somos más digitales”. El supermercado online, aunque todavía tiene un peso muy pequeño (0,9%), ha registrado una evolución muy positiva (17%) con respecto al año pasado. En concreto, uno de cada cuatro hogares ha hecho una compra online en 2018.
En este canal, los envasados siguen siendo favoritos frente a los frescos. De hecho, los primeros cuentan con una cuota del 1%, mientras que los segundos tan solo llegan al 0,6%. Sin embargo, el crecimiento de los envasados es del 15% con respecto al 2017, llegando a duplicar este porcentaje en el caso de los frescos.