El comercio electrónico sigue creciendo en España en el mercado del gran consumo, si bien no todas las categorías logran incrementos. Por ejemplo, la alimentación envasada registra un estancamiento a la hora de ganar adeptos a la compra online, con apenas un 17% de consumidores a través de este canal.
En el lado opuesto se posiciona la compra de bebidas espirituosas y el vino, con un 4% más de compradores por la red, si bien en este caso no llegan al 20% y se quedan en un 16%, los que se surten de estos productos por Internet.
La categoría estrella es el llamado “Food delivery”, cuyos consumidores online crecen un 4% este año con respecto a 2017, y se sitúan con un 36% de compradores, según el informe “Comercio Conectado” de Nielsen.
Hay además otras categorías asociadas al gran consumo que de manera particular crecen y van sumando compradores digitales. Es el caso de la alimentación para mascotas, con un 20% de consumidores online (+3%) y productos para la limpieza del hogar, con un 18% (+3%).
Según Isabel Jiménez, Client Business Partner de Nielsen, "el gran consumo tiene la oportunidad de trabajar algunos aspectos relacionados con la experiencia de compra con vistas a incrementar los consumidores que empiecen a combinar lo físico con lo digital y no opten solamente por lo primero. Es el caso de los costes extra en la entrega de los pedidos, en tanto a un 35% de consumidores, si se le ofreciera de forma gratuita este servicio a partir de un gasto mínimo, los animaría a la compra online”.
“Las barreras al ecommerce de gran consumo en España están muy asociadas a la confianza, por lo que el sector debe incidir en la mejora de la percepción de este canal de compra, aportando facilidades para elegir productos frescos y la gestión de devoluciones, y así asistir a un boom como el que está sucediendo con el delivery en la hostelería”, añade.