En la actualidad, la acuicultura representa alrededor de la mitad de la producción mundial de peces, moluscos y crustáceos y, según las previsiones, antes de 2030 puede constituir más del 65%, tal y como ha señalado el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación con motivo de la celebración del Día Nacional de la Acuicultura.
Asimismo, el departamento ha recordado que el sector productor acuícola español ha situado a España como el mayor productor de acuicultura a nivel europeo. España cuenta con más de 5.000 establecimientos relacionados con este sector que dan empleo a 20.000 personas. Estos datos “ponen de relieve el papel protagonista que juega y puede jugar esta actividad en la recuperación y el relanzamiento social y económico de muchas zonas rurales y litorales”, ha destacado el Ministerio.
Asimismo, “siendo conscientes del gran potencial y largo recorrido que aún tiene por delante en nuestro país este sector productivo”, desde el Ministerio se está trabajando para dotar a esta actividad de los instrumentos y herramientas que permitan, en el ámbito de sus competencias, reforzar la competitividad a través de una apuesta decidida por la innovación y el desarrollo tecnológico, tal y como se recoge en el Plan Estratégico de la Acuicultura española, 2014-2020.
Para potenciar la actividad acuícola en España, la estrategia definida en el Plan Estratégico tiene como misión la mejora de la planificación y ordenación del sector a partir de la aprobación de un marco legal y administrativo específico que potencie sus capacidades y fortalezas. Un marco que permita también dar respuesta a las debilidades que presenta, en una apuesta por parte de las empresas por la I+D+i, la internacionalización de productos y procesos y por el mantenimiento y refuerzo de los estándares de calidad, sanidad, bienestar animal y protección del entorno que en la actualidad viene aplicando el sector.
Los principales retos a los que se enfrenta el sector acuícola para su relanzamiento, están directamente relacionados con la necesidad de simplificar los procedimientos administrativos, de forma que pueda reducirse los actuales plazos para el otorgamiento de concesiones acuícolas. También una mejora de la planificación y ordenación espacial, que identifique nuevas zonas en las que la acuicultura pueda seguir desarrollándose en las mejores condiciones, garantizando una adecuada protección y conservación de los recursos naturales.
El Plan Estratégico Plurianual de la Acuicultura española, establece entre sus líneas estratégicas prioritarias, la mejora de la planificación espacial y selección de nuevos emplazamientos. Para ello la Secretaría General de Pesca del Ministerio, en coordinación con las Comunidades Autónomas a través de la Junta Nacional Asesora de Cultivos Marinos (JACUMAR), están trabajando en la identificación de zonas de interés para la acuicultura, poniendo en marcha actuaciones en el marco del crecimiento sostenible de la actividad y su coherencia con la planificación estratégica sectorial
También el Fondo Europeo Marítimo y de la Pesca (FEMP), propuesto para el periodo 2014-2020, a través de su Prioridad 2, persigue fomentar una acuicultura sostenible desde el punto de vista medioambiental, eficiente en el uso de los recursos, innovadora, competitiva y basada en el conocimiento, estableciendo toda una batería de objetivos específicos que permitirán dar respuesta a los retos actuales a los que se enfrenta el sector productor.
Uno de estos objetivos estratégicos es la mejora de la gestión espacial de la acuicultura. Para esta prioridad se han programado 274 millones de euros de los cuales 206 millones corresponden a la aportación comunitaria y 68 millones de euros a la aportación nacional.