El 75% de los consumidores están dispuestos a compartir sus datos en Internet cuando realiza compas, pero más de la mitad están preocupados por el robo de identidad y casi tres cuartas partes no confían a nadie sus datos de redes sociales.
Así lo revela un estudio publicado este lunes por KPMG International, que incluye una encuesta realizada a 25.000 consumidores en el Reino Unido, EEUU, EAU, Francia, Brasil, Canadá, China e India.
El análisis, publicado por el programa Global Consumer Insights de KPMG como parte del informe 2018 “Yo, mi vida, mi billetera”, muestra una cuarta parte de los consumidores (24%) no intercambiarían sus datos; sin embargo, es más probable que los consumidores millenials (21%) que sus homólogos del baby boom (5%) intercambien sus datos por una mejor experiencia y personalización del cliente.
Del mismo modo, una quinta parte (19%) de los millenials cambiaría sus datos por mejores productos y servicios, en comparación con solo el 8%de los baby boomers. El estudio muestra que los consumidores más jóvenes están igual de ansiosos y preocupados por identificar el fraude, sin embargo, es más probable que vean los beneficios de compartir datos.
Los hallazgos sugieren que las empresas pueden ganarse la lealtad de los consumidores siguiendo cuatro reglas para la transparencia de los datos: explicar claramente por qué está solicitando ciertos tipos de datos y cómo los va a proteger; ser honesto sobre si se vende o comparte estos datos fuera de la organización; no ser egoísta sobre el valor de los datos y recompensar los consumidores por compartir sus datos.
Y es que los consumidores son cada vez más conscientes del valor de sus datos. Así, la investigación muestra que el 85% de los consumidores quiere que las empresas protejan su información sin tener que preguntar, y el 77% está en contra de la venta de sus datos. Es probable que las empresas que siguen estas reglas se desempeñen mejor que la competencia, señala el estudio.
A este respecto, Julio J. Hernández, director global de Asesoría al Cliente, ha señalado que “los consumidores están ansiosos, y las generaciones más jóvenes lo sienten más. A ellos les gusta la nueva tecnología, pero les preocupa la entrega de datos personales y lo que podría significar para su privacidad y seguridad. Nuestra investigación demuestra que las organizaciones deben ser conscientes de la mayor conciencia que tienen las personas sobre el valor de sus datos; quieren sentir que tienen el control en cada etapa de la relación comercial”.
“Muchas empresas aún no han comprendido completamente las preocupaciones de los consumidores sobre compartir sus datos, o cómo esto podría afectar la lealtad del consumidor. Sin embargo, cada vez más empresas buscan monetizar los datos que poseen, ya sea lo que ponemos en nuestra cesta de la compra, cuántas veces a la semana hacemos ejercicio o lo que decidimos ver. Los consumidores son más conscientes del valor de sus datos, y las empresas deben responder a este nuevo tipo de cliente basado en la tecnología y el conocimiento de los datos", ha añadido.
Por sectores, el 71% de los consumidores afirma que confiaría sus datos financieros a un proveedor de servicios bancarios y un 47% sus datos móviles a un proveedor de telecomunicaciones. Sin embargo, solo un 9% proporcionaría información financiera a un minorista y un 8% se fiaría de los anunciantes.
Asimismo, el informe revela que a nivel mundial, el 51% de los consumidores está preocupado por el robo de identidad, el 48% por piratear información financiera, médica u otra información personal online y el 46% por robo de información de tarjetas de crédito cuando realiza compras en línea.