El uso eficiente de los recursos se ha convertido en uno de los objetivos estratégicos de los supermercados de Asedas, que pide colaboración entre todos los eslabones de la cadena para avanzar en economía mundial.
Así lo ha destacado la Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados con motivo de la celebración de la Semana Europea de Prevención de Residuos, que tiene lugar entre los días 17 y 25 de noviembre.
“La distribución alimentaria está realizando grandes acciones en este sentido, la mayoría de ellas requieren de una estrecha colaboración con proveedores, agentes logísticos y sistemas integrados de gestión de residuos, condición necesaria para avanzar en una economía sostenible real”, señala al respecto la organización.
Asimismo, tal y como señala Ignacio García Magarzo, director general de Asedas, “el compromiso de los supermercados de Asedas con la economía circular es estratégico, por lo que se están invirtiendo muchos recursos técnicos y económicos en avanzar en ella. Sin embargo, el impulso de soluciones sostenibles solo puede ser efectiva con la participación activa y comprometida de todos los eslabones de la cadena y también de las administraciones, a quienes corresponde dotarnos de una legislación que introduzca plazos de adaptación realistas e infraestructuras adecuadas para faciliten el cambio”.
Las soluciones que el supermercado apoya, y en muchos casos lidera, tienen que tienen que ver con acciones como el eco-diseño, que consiste en conseguir mejoras relacionadas con la forma, las dimensiones y el gramaje de los envases o el uso de materiales reciclables y la búsqueda de fórmulas para evitar el sobreembalaje y la reducción de plásticos, en que los supermercados han sido palanca de cambio son las bolsas de un solo uso, que comenzaron a cobrarse de manera voluntaria en 2009, con lo que se ha reducido su demanda en un 85%.
También se trabaja en lograr una gestión optimizada del almacén junto con el establecimiento de rutas de proveedores de cercanía que consiguen llevar los productos frescos del campo al supermercado en 21 horas. Esta estrategia incide en un control del surtido que hace que el desperdicio alimentario en los supermercados de ASEDAS se calcule entre el 0,2% y el 1%.
Asimismo, han cobrado importancia las acciones de reutilización. El pool de envases de fruta y verduras es un gran ejemplo de reutilización en la logística de un supermercado que dota a cada caja de plástico reciclado de una vida media útil de cinco años y les permite hacer todo el proceso logístico, del campo a la tienda, unas 13 veces al año.
Por último, la asociación destaca el trabajo que está realizando en reciclaje, donde las políticas de “vertido cero” tienen como objetivo incrementar año tras año las tasas de reciclaje de todo tipo de materiales (plásticos y cartones, principalmente), que en la actualidad se sitúan en Asedas en valores medios que rondan el 75%. Aquí cobran un papel fundamental los sistemas integrados de gestión de residuos y todas las empresas recicladoras y recuperadoras que están al final de la cadena.