El volumen de compra de productos de alimentación ha experimentado un incremento del 0,3% en el interanual a junio de 2018, mientras que en términos de valor el crecimiento es más significativo (2,4%) gracias a la relación directa con el precio medio que aumenta un 2,1% en este periodo.
Los datos del informe Alimentación en España en el mes de junio del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación revelan un retroceso en el consumo de carne del 0,5% con respecto al mes de junio de 2017. En valor, este segmento crece un 2,4%.
Tanto la carne fresca como la congelada pierden volumen de demanda respecto a los 12 meses previos (-1,2% y-2,3% respectivamente), la carne transformada incrementa su volumen de compra con una variación en positivo del 2,1%. Todos los tipos de carne fresca pierden presencia en el hogar durante el año móvil a junio de 2018, excepto la carne fresca de cerdo que aumentó un 1,3% su presencia en el hogar. La carne de pollo y vacuno redujeron su presencia en el hogar con caídas del 3,8% y 1,2% respectivamente.
En cuanto a la pesca, el consumo durante los últimos 12 meses retrocedió un 1,9%, la disminución fue más acusada para pescados frescos (-3,8%) que para pescados congelados (-1,0%). Las conservas de pescado/molusco presentan incrementos en su volumen de compra del 1,7%, mientras que el consumo de mariscos/moluscos/crustáceos desciende un 1,5%.
La compra de leche líquida se incrementa durante los últimos 12 meses del año un 1,6%, de igual forma los derivados lácteos ganan presencia en los hogares españoles con una variación positiva del 2,3%.
Otras categorías de alimentación básica como el azúcar y el pan sufrieron variaciones de su consumo en negativo (-2,7%, y-0,4% respectivamente) mientras que la compra de legumbres y huevos presentaron aumentos en su demanda (+6,2% y 2,8% respectivamente).
Se intensifica la compra de aceite en los hogares a cierre de junio de 2017 a junio de 2018 (+3,8%). En valor el crecimiento es a doble dígito (+11,3%). Los dos tipos de aceite con mayor proporción de consumo en los hogares tienen la misma evolución tanto en volumen como en valor. Así pues, la compra de aceites de oliva creció en volumen un 2,4%, con impacto en facturación del 12,1%, mientras que el impacto del aceite de girasol fue más notorio en volumen con una variación en litros respecto a los 12 meses previos del 11,1%, y una repercusión en valor del 7%.
Merma la compra de patatas frescas durante los últimos 12 meses un 2,5%, su valor presenta una variación negativa muy significativa del 10,8%. La presencia de hortalizas frescas en los hogares españoles es contenida (-0,1%), si bien se reduce la cantidad de frutas frescas en los hogares durante los últimos 12 meses.
En relación con las bebidas, destaca el descenso de las bebidas derivadas del vino (-8,5%), así como el descenso de bebidas espirituosas (-4,4%). La compra de vino durante los últimos 12 meses se redujo por parte de los hogares españoles un 1,1%. Se reduce la compra de vinos sin DOP/IGP, así como los vinos con DOP, por el contrario se intensifican las compras de vinos con IGP. Hay que destacar la buena evolución de cervezas con un incremento de su volumen del 1,5%, y de sidras con un significativo aumento en compras del 4,5%. El agua de bebidas envasadas mantiene su senda de crecimiento, también a cierre de año móvil a junio y crece un 4,1%.