Knorr lanza al mercado sus nuevas cremas refrigeradas, elaboradas con productos frescos, con las que consolida su apuesta por ofrecer productos más naturales bajo su nueva imagen.
Con estas nuevas cremas, la compañía entra en el sector de los refrigerados, satisfaciendo a los que buscan cada vez más naturalidad y autenticidad en los alimentos que compran.
Para facilitar el día a día a los consumidores se presentan, además, en un formato práctico ideal para poder calentar en el microondas y consumir tanto en casa, en el trabajo como allí dónde se quiera. Además, elaboradas con verduras frescas recogidas en su punto óptimo de madurez, las nuevas cremas refrigeradas de Knorr son una fuente de fibra, con un mejor sabor y textura.
Las nuevas cremas refrigeradas de Knorr están disponibles en tres variedades: crema de calabaza, crema de zanahoria con jengibre y crema de brócoli y espinacas.
La crema de calabaza cuenta con casi un 40% de calabaza en su elaboración, e incluye además cebolla, patatas, un toque de nata, ajo y jengibre. La crema de zanahorias con jengibre, por su parte, es una sabrosa combinación que se completa con otros ingredientes como cebolla, raíz de perejil y apio, puerro, zumo de naranja, ajo y pimienta blanca. La crema de brócoli y espinacas está acompañada por un toque de puerro, raíz de perejil y apio, cebolla y pimienta blanca.