El desperdicio alimentario es una realidad en España. El 8% de la comida que se compra acaba en el cubo de la basura, según un estudio llevado a cabo por Movinga.
De hecho, según este estudio, los españoles no son tan conscientes del valor real que tiene este desperdicio ya que, una vez encuestados, sólo creen que se desperdicia un 5% en vez del 8% real.
Sin embargo, España no está entre los principales países más derrochadores. Por encima se encuentran Estados Unidos (24%), Canadá (21%), Suiza (18%) o Reino Unido (15%), entre otros. Japón y Dinamarca son los países que menos comida tiran a la basura, con un 4% cada uno.