Bodegas Protos ha presentado sus resultados del 2017 ofreciendo los mejores datos de su historia. Así, la bodega ha crecido en facturación 3,66 millones de euros, lo que supone un aumento del 10,6% respecto al ejercicio anterior, gracias al buen comportamiento de todas las categorías y canales en los que opera.
Según ha destacado la compañía, gran parte del éxito se debe a su estrategia basada en la calidad de todas las categorías de sus vinos, a los mercados exteriores que han crecido en ventas un 13% y suponen ya la presencia de sus vinos en 99 países y la consolidación de los vinos blancos de la bodega, los Protos Verdejo.
Por otro lado, la bodega continúa innovando en todos sus campos gracias a la alta política de reinversión de la empresa a la que destinan el 80% del beneficio neto obtenido. Así, se ha realizado una inversión de 10 millones de euros en las instalaciones de Anguix, Burgos, territorio de las cepas más antiguas de Protos o la mejora de sus instalaciones dedicadas al enoturismo en su bodega enseña de Peñafiel, Valladolid donde el pasado año se ha recibido a 38.300 visitantes, convirtiéndose así en la bodega más visitada de la Ribera del Duero.
Respecto a la pasada cosecha, la bodega destaca que “ha sido de muy buena calidad, pero tristemente un 59% más corta debido a la sequía que el año anterior lo que ha encarecido el precio de la uva hasta en un 60%. Sin embargo, la forma de entender el éxito para Protos consiste en cuidar a sus clientes y consumidores para continuar posicionados como su marca preferida de confianza”.
Por ello, la bodega sacrificará en 2018 una parte importante de su margen de beneficios para mantener la estabilidad de los precios de sus vinos. Además, gracias a su política de mantenimiento de stock de seguridad, Protos afirma que es capaz de abastecer al mercado en 2018 con una bajada previsible del 15% en vez del 60% que ha supuesto la corta cosecha.