El empleo en el sector de la alimentación representa ya un 2,1% del empleo total en España, frente al 0,6% del año anterior, lo que supone un incremento del 1,5% en tan solo doce meses, según las previsiones realizadas por Adecco a través de su división especializada de alimentación.
Así, la compañía de RRHH recuerda que la evolución del sector agroalimentario en los últimos tres años ha sido muy positiva, pues ha crecido un 1,3% interanual debido, fundamentalmente, al aumento del valor en las fases de producción y de la industria alimentaria. Respecto a ésta, el informe señala que el peso del empleo en la alimentación es del 7,9%, 3,5 puntos más que un año atrás.
“Teniendo en cuenta estas cifras tan positivas, las previsiones que se manejan desde Adecco Alimentación van en línea con esta tendencia, pues se prevé que se siga generando empleo y que este crezca al ritmo del 1,5% interanual en los próximos cuatro años”, señala.
En concreto, el sector alimentario solicita profesionales de 32 años de media, edad que ha descendido interanualmente en 0,4 años. El mayor grueso de ofertas de empleo se concentra en los candidatos de entre 26 y 30 años, que conforman el 34,9% del total y en los de edades comprendidas entre los 21 y los 25 años (30,4%). Al igual que en otros sectores, los mayores de 46 años son los más perjudicados, pues solo un 0,9% de las ofertas se dirige a ellos.
Además, la necesidad creciente de cualificación ha disparado la demanda de personas con titulación en grados de Ciencia y Tecnología de los Alimentos y de Nutrición Humana y Dietética. Así, varios son los tipos de profesionales que la industria alimentaria incorpora habitualmente y cuya demanda se incrementará en los próximos años, especialmente en dos posiciones que serán estratégicas: técnicos de mantenimiento y nutricionistas.
Impacto de la tecnología
Por otro lado, el informe de Adecco señala que la industria dedicada a los alimentos ha experimentado importantes cambios en los últimos años, especialmente, cambios a nivel tecnológico. Estas modificaciones han derivado en una mejora sustancial de la calidad alimenticia y una mayor disponibilidad de productos frescos.
Sin embargo, esta evolución del sector ha derivado en la exigencia de una mayor formación por parte de los trabajadores, que no solo deben saber desempeñar las funciones tradicionales de su puesto, sino que ahora, en algunos casos, se les exige el conocimiento o manejo de ciertas tecnologías que se han incorporado recientemente.
En este sentido, según Mila Montañana, directora de Adecco Alimentación, “la implementación de nuevas tecnologías en el sector no está suponiendo la eliminación de puestos de trabajo, pero sí que está elevando los requisitos necesarios para acceder a esos empleos. Ahora más que nunca, las empresas buscan profesionales cualificados, capaces de adaptarse a los cambios y con habilidades y conocimientos en nuevas tecnologías”.
Con respecto a la futura robotización del sector, Montañana destaca que “el sector de la alimentación siempre tendrá un componente humano debido, entre otras cosas, a que existen multitud de labores técnicas que requieren un gran nivel de detalle que sería imposible realizar con máquinas. Otras, en cambio, como las labores de envasado o de almacén ya están siendo robotizadas, por lo que, en estos ámbitos, la demanda de perfiles tecnológicos ya está aumentando”.
Asimismo, los cambios en los hábitos de consumo de los españoles, que cada vez dan mayor importancia al origen nacional o local de los productos, y el aumento en las ventas de productos vegetales, ecológicos y biológicos también están teniendo su impacto en el empleo. De hecho, empiezan a emerger empresas de productos ecológicos que son más exigentes con el personal, ya que sus certificaciones son mayores y requieren una mayor formación, incluso los EPIs requeridos pueden ser diferentes.
En la misma línea, las empresas que ya operan en el mercado de la alimentación están lanzando nuevas líneas de productos enfocados a estos consumidores, lo que está impulsando la creación de empleos y, por consiguiente, la ampliación de plantillas para hacer frente a las nuevas necesidades.
Por último, el informe recuerda que la demanda de profesionales cualificados ha crecido de forma exponencial dentro del sector alimentario, por lo que la solicitud de estudios universitarios se ha disparado. Los grados de Ciencia y Tecnología de los Alimentos y el de Nutrición Humana y Dietética son los más demandados en la oferta dirigida a profesionales de este sector.