Los productores de la variedad protegida de mandarina Orri han logrado comercializar cerca de 52.000 toneladas en la campaña 2018, lo que supone un incremento del 100% respecto a la campaña anterior (26.000 toneladas)
Los resultados obtenidos en su tercera campaña tras la regularización voluntaria llevada a cabo por TEO, licenciatario máster de la variedad en España y Portugal, la sitúan un año más, como la variedad de mandarina mejor cotizada del mercado, con un precio medio aproximado de un euros/kilogramo en campo.
Por provincias, el 27,85% de las mandarinas comercializadas corresponde a la provincia de Huelva, un 22,95% a la provincia de Valencia, el 15,95% a la Región de Murcia, el 13,85% a la provincia de Castellón, un 8,7% a la de Almería, un 5,8% a la de Alicante y el 4,9% a la provincia de Sevilla.
Entre las características de esta variedad premium cabe destacar su facilidad de pelado, su escaso contenido en semillas y sus cualidades organolépticas, con un alto contenido en azúcares que le confieren un sabor dulce característico. Además, cuenta con una piel muy resistente de color naranja intenso que le proporciona una excelente conservación tanto en el árbol como en postcosecha y en postventa, con un período de recolección muy amplio.
“Precisamente sus excelentes condiciones de conservación han hecho posible que la variedad Orri se consolide como la mandarina con la campaña comercial más larga del mercado, alcanzando los cinco meses (de diciembre a mayo)”, según ha destacado Orri Running Committee (ORC), asociación compuesta por más de 480 productores de esta variedad, que prevé mantener la tendencia al alza en la próxima campaña, en la que esperan superar los 60 millones de kilogramos comercializados.
Durante la presente campaña, dentro de las acciones de fomento y promoción que la asociación ORC está desarrollando para salvaguardar el valor de la mandarina Orri y proteger a los consumidores de posibles fraudes, se han reforzado las acciones de control sobre la producción y comercialización de esta variedad mediante la realización de inspecciones periódicas en seis de los principales puntos de la Red de mercados mayoristas de España, así como en grandes superficies de España, Reino Unido y Francia. En el desarrollo de las mismas se han investigado a más de 20 puntos de venta.
Durante las inspecciones se han comprobado posibles fallos de etiquetado, se han realizado seguimientos de trazabilidad para comprobar el origen legal de la producción y se han llevado a cabo análisis con marcadores moleculares para comprobar si el producto comercializado como mandarina Orri correspondía con lo indicado.
Desde ORC han señalado que “estas acciones están enfocadas a evitar falsas identificaciones de la mandarina Orri en los puntos de venta lo que, por un lado, es un fraude al consumidor y por otro, le genera confusión al no poder relacionar la variedad Orri con sus excelentes cualidades”.