Crestas la Galeta, propietario de las marcas de helado Somosierra y Royne, es el primer fabricante de helados del mercado en eliminar el aceite de palma de todos y cada uno de los ingredientes que utiliza para la fabricación de todos sus productos.
Durante los últimos años la compañía ha realizado un importante esfuerzo de transformación e investigación junto con sus proveedores, renovando el proceso de producción para conseguir lanzar al mercado, desde principio de 2018, todos sus productos completamente libres de este aceite, según ha destacado en un comunicado, que señala que la renovación forma parte de la inversión realizada en los tres últimos ejercicios que asciende a cuatro millones de euros.
De acuerdo con las exigencias del consumidor y del compromiso con el medio ambiente, el esfuerzo se ha centrado en la búsqueda de ingredientes alternativos de calidad y reconocimiento. Se han desarrollado diferentes procesos y técnicas industriales para poder alcanzar los mismos resultados de calidad organoléptica.
Somosierra y Royne afianzan así su plan de negocio iniciado en 2013, cuando el primero adquirió Helados Royne, en una operación que incluía la marca, la fábrica de Leganés en Madrid, inmuebles, maquinaria y una flota de cerca de 200 vehículos para el transporte de helados.
Con esta compra la compañía ha elevado su capacidad de producción en un 65% pudiendo alcanzar los 40 millones de litros. En la actualidad está elaborando cerca de 24 millones de litros de helados al año. Además, ha conseguido relanzar las marcas y estar presentes en todo el sector de la distribución.
Durante los últimos años, Somosierra y Royne se han centrado en ofrecer productos con un valor añadido y elementos diferenciadores en el sector heladero a través de su marca Special Line. Una línea innovadora y saludable con la producción de helados sin azúcares añadidos, sin gluten, sin lactosa o de soja, aptos para veganos, como opción a las nuevas tendencias y gustos de los consumidores actuales.