Con el objetivo de ser cada día más eficiente, la cadena de distribución Lupa está inmersa en un importante proceso de ampliación de sus centrales logísticas, lo que le permitirá seguir creciendo en empleo y en establecimientos, abarcando nuevas actividades y ampliando su surtido.
Actualmente, está presente en 10 provincias de tres comunidades autónomas (Castilla y León, Cantabria y La Rioja) y cuenta con 165 establecimientos entre supermercados y cash & carry. Su cifra de negocio en 2017 ha sido de 500 millones de euros y cuenta con una plantilla por encima de las 3.000 personas. Dispone de dos Centrales Logísticas desde las que abastece diariamente a todos sus puntos de venta.
Estrena supermercado
Además, la cadena inaugura un nuevo establecimiento en ávila con 1.300 metros cuadrados de superficie. Esta apertura ha supuesto una inversión de 1,2 millones de euros y se han creado 23 puestos de trabajo directos.
Tiene a disposición del público un surtido formado por más de 8.000 referencias, destacando los productos locales, productos sin gluten, marcas propias (Alteza, Selex, Tandy, Crowe, Deleitum), marcas de fabricante, es decir, un amplísimo surtido capaz de satisfacer las necesidades de cualquier cliente. Destaca igualmente, la calidad de sus productos frescos (carnicería, charcutería, frutas y verduras y horno de pan caliente) gracias a la rigurosa selección que Lupa lleva a cabo y, muy especialmente, la pescadería, que procede de las principales lonjas del Cantábrico y que en menos de 24 horas está expuesta en sus supermercados, para así garantizar su calidad y frescura.
Lupa se encuentra vinculada a ávila desde junio de 2013, con la apertura de su primer establecimiento en Arévalo, supermercado que continúa prestando servicio a la localidad. Posteriormente abrió el cash & carry en el polígono Las Hervencias.