La campaña de recolección de ajo 2018 ya se ha iniciado, con un retraso de 15 días respecto al año pasado, debido a las lluvias de marzo y abril y con un descenso estimado de la producción de entre el 3% y el 5%, según la Asociación Nacional de Productores y Comercializadores de Ajo, Anpca, integrada en Fepex.
Esta entidad, que actualmente cuenta con 57 empresas asociadas y representan aproximadamente el 50% de la superficie total de ajo cultivada en España y cerca del 75% del ajo comercializado, ha valorado que la cifra total de hectáreas sembradas en esta campaña permanece estable con respeto a la campaña anterior, alcanzando las 26.000 hectáreas, por lo que dicho descenso de la producción será debido a la falta de horas de sol durante los últimos meses que ha provocado un descenso de los calibres actuales.
Para el vicepresidente de Anpca, José Carlos Arroyo, el retraso en la llegada de la nueva producción ha permitido la eliminación de parte del stock existente en cámara, con lo que la nueva cosecha se encontrará con un mercado con escasas existencias de la pasada campaña, en la que se sobrepasaron las 267.000 toneladas producidas.