El consumo de vino entre el público joven, por debajo de los 35 años, se sitúa por debajo de la media nacional. En concreto, los hogares jóvenes compran vino de promedio una vez cada dos meses, con un gasto de 23 euros/año y un consumo de 10 litros/año.
Frente a este dato, la media global de hogares españoles compra vino una vez al mes de promedio, gastan 63 euros/año y compran 27 litros/año. Los hogares jóvenes realizan por tanto un 60% menos de gasto que la media de promedio al año. Solo el 15% de los jóvenes españoles consumen vino semanalmente en casa, una cifra significativamente menor a la media nacional (26%), mientras que en los mayores de 50 años esta cifra asciende a casi un 40%.
Así lo revela el Informe Kantar Worldplanet realizado para Lidl en 2017 y que se ha presentado durante la II Jornada S.O.S. Vino en España, centrada en el consumo entre el público joven adulto (de 18 a 35 años), organizada por Lidl y dirigida por el Master of Wine español Fernando Mora y con la participación de reconocidos profesionales del sector, como la Organización Interprofesional del Vino de España (OIVE), productores, expertos en marketing y puntos de venta, que han hablado sobre la necesidad de impulsar el consumo en este segmento, para generar el crecimiento necesario a corto y medio plazo.
Comparando estos datos con el año anterior, se observa una doble tendencia: en el segmento de 18 a 24 años, el porcentaje de individuos que consumen vino semanalmente se incrementa, como lo hace el número de veces que consumen de media vino a la semana, dando lugar a un crecimiento en términos absolutos; pero por el contrario, en el segmento de 25 a 34 años, se reducen tanto la penetración semanal como la frecuencia semanal.
En este contexto, los participantes al encuentro han destacado la importancia de aumentar el consumo a corto y medio plazo para definir el futuro en el sector del vino, siendo necesario democratizar su consumo y hacerlo accesible a todos, desde expertos conocedores a público en general. Y si se piensa en el futuro, la clave está en apostar por el público joven como uno de los segmentos que generará tal crecimiento.
Para conectar con el público joven, como palanca de crecimiento del sector, Fernando Mora destca que “es necesario dirigirse a ellos con mensajes y un lenguaje de comunicación que hagan el vino más atractivo, conectando con las tendencias afines con este público: facilidad e inmediatez para la compra, personalización, sostenibilidad, fusión, activación, trasparencia, Trade-up, felicidad y bienestar y educación.
“Es necesario acercar de nuevo el vino al público joven, con un lenguaje más afín y emocional”, han destacado los actores del sector. Así, según Susana García, directora de la Organización Interprofesional del Vino de España (OIVE), “el público joven ve el vino como algo complejo. No se trata de saber de vinos, sino de que la vida tiene muchos momentos para disfrutar del vino”.
Por su parte, Analía Blanco, directora de compras de vino de Lidl España, ha destacado el fuerte compromiso hecho desde Lidl por recuperar la cultura del vino, ofreciendo a los consumidores muy diferentes formas de compra y amplia información de cada producto, reduciendo así las barreras de entrada en cuanto al conocimiento necesario para su compra, especialmente en el segmento joven.