Caprabo ha cerrado el año 2017 con un importante avance en el desarrollo de su plan estratégico de apertura de supermercados. Así, en 2017 ha invertido más de cuatro millones de euros en la apertura de 20 nuevas tiendas en régimen de franquicias, cifra que supone su mejor año de expansión de la última década.
De este modo, el negocio de franquicias de Caprabo ha registrado en el último ejercicio un incremento del 20%. Las aperturas se han producido, principalmente en Barcelona y su provincia, y también en Tarragona y Andorra y han supuesto la contratación de unas 130 personas.
La compañía ya suma 62 franquicias con los formatos Caprabo, Rapid Caprabo y Aliprox, después de iniciar su plan de expansión por medio de franquicias en el año 2011. A lo largo de estos años, las aperturas desarrolladas han generado unos 400 puestos de trabajo y la incorporación a la red de Caprabo de más de 18.000 metros cuadrados de superficie comercial.
Según ha destacado Claudio Estévez, director de Franquicias de Caprabo, “2017 ha supuesto un punto de inflexión en el plan de desarrollo y expansión de Caprabo. Nuestro proyecto sigue avanzando de forma positiva y está basado en mantener una política selectiva de aperturas. Queremos convertirnos en la franquicia de alimentación con más relevancia en Cataluña y unido al ritmo de aperturas, que consideramos sostenible, contamos con unas cifras de crecimiento en ventas del doble dígito”.
Uno de los hitos más importantes del plan de franquicias de Caprabo se ha producido este 2017 con la apertura del modelo franquiciado de Caprabo a empresas de la economía social. Así, el pasado noviembre, la Fundación AMPANS y Caprabo abrieron el primer supermercado de Cataluña íntegramente gestionado por personas con discapacidad.