Cada hogar español dedicó un 14,5% de su presupuesto a alimentos y bebidas no alcohólicas (4.647 euros) y un 13,7% a Transportes (4.363 euros). Cabe destacar que en 2006 y 2007 el gasto en Transportes era ligeramente superior al de alimentación, pero que en 2008 se ha invertido la tendencia.
El gasto medio por hogar en el conjunto de España en el año 2008 fue de 31.953 euros, cifra un 0,1% menor que la registrada en 2007. Eliminando el efecto de la inflación la variación fue del -4,1%, según datos hechos públicos por el Instituto Nacional de estadística (INE).
El gasto total registró en 2008 un incremento del 2,7% respecto al año anterior. En términos constantes la variación interanual fue del –1,4%. Los dos grupos que representaron un mayor porcentaje del gasto, Vivienda, agua, electricidad y otros combustibles y Alimentos y bebidas no alcohólicas, presentaron crecimientos positivos respecto del año anterior del 9,2% y 5,2%, respectivamente.
El gasto medio por persona en 2008 fue de 11.801 euros, con un incremento del 1,1% respecto al registrado en el año anterior. En 2008 el mayor gasto por persona se registró en los hogares unipersonales. Las personas menores de 65 años que vivían solas gastaron 21.596 euros, mientras que para las de 65 o más años el gasto fue de 15.182 euros.
Los hogares formados por una pareja con tres o más hijos, con un gasto por persona de 8.729 euros, se situaron en el extremo opuesto. Sin embargo, estos hogares fueron precisamente los que realizaron el mayor gasto por hogar (45.763 euros de media).
En cuanto a la distribución del gasto, los hogares formados por una persona sola de 65 o más años fueron los que más porcentaje de su presupuesto dedicaron a la alimentación. Por su parte, las personas solas menores de 65 años fueron las que menor porcentaje destinaron a alimentación en el hogar.
De los 4.647 euros que cada hogar dedicó en 2008 a Alimentos y bebidas no alcohólicas consumidas en el hogar, un 24,5%, se destinó a Carne, un 15,7% a Pan, pastas y cereales y un 11,7%, a Pescado.
En el año 2008 el consumo de carne aumentó un 4,2%, mientras que el de pescado bajó un 3,6%. Así, cada persona consumió al mes, en media, 4,7 Kg. de carne y 2,0 Kg. de pescado.