La Confederación Española de Comercio (CEC) prevé un crecimiento interanual en las ventas de las rebajas de aproximadamente un 3%, a pesar del adelanto de los descuentos a las últimas semanas de diciembre. De esta manera, la CEC tiene muchas esperanzas en que estas rebajas de invierno sirvan para relanzar las ventas en el comercio minorista.
El presidente de la Confederación, Manuel García-Izquierdo, asegura que “este año tendremos una campaña breve y dispersa, con las ventas en rebajas concentradas en los primeros 10 ó 15 días”. Además, la CEC estima que los porcentajes de descuento iniciales en las pymes de comercio estarán entre un 30% y un 50%, pudiendo llegar hasta un 80% al final de las rebajas.
Sin embargo, la Confederación pide a la Administración pública la necesidad de “establecer un período de rebajas perfectamente definido”, como sucedía hasta julio de 2012. Con ello, afirman, se garantizaría una mejor promoción de las mismas y se pondría fin a la desorientación del consumidor, que ya no tiene claro en qué período es mejor hacer sus compras.
El adelanto de los descuentos a pleno mes de diciembre y primeros días de enero por parte de muchas firmas comerciales ha arrastrado a muchos pequeños y medianos comercios a hacer lo mismo, como una forma de dar salida al amplio excedente de artículos. “Realizar estos descuentos en plena temporada otoño-invierno lastra nuestros márgenes y descalabra de manera irreparable el resto de la campaña”, asegura el presidente de la CEC.
Estas promociones adelantadas, que los propios comercios califican como rebajas, “afectan al concepto original de las rebajas”. Como explica Manuel García-Izquierdo, “si los consumidores adelantan sus compras ya desde diciembre, tendrán menos poder adquisitivo de cara a Reyes y a las rebajas de invierno”.