La Comisión Europea ha informado a AB InBev de su opinión preliminar de que la compañía ha abusado de su posición dominante en el mercado cervecero belga, al obstaculizar importaciones más baratas de sus cervezas Jupiler y Leffe de los Países Bajos y Francia a Bélgica.
Según ha informado el ejecutivo comunitario, “la competencia efectiva es importante para que los consumidores europeos cosechen todos los beneficios del mercado interno. Este caso es un ejemplo del esfuerzo de la Comisión para garantizar la competencia efectiva en todos los niveles de la cadena de valor de los agricultores, productores y distribuidores a los consumidores”.
En palabras de Margrethe Vestager, comisaria a cargo de la política de competencia, "los consumidores belgas pueden haber tenido que pagar más por sus cervezas favoritas. Nuestra conclusión preliminar es que AB InBev pudo haber prevenido deliberadamente que las importaciones de cerveza más baratas de Francia y los Países Bajos lleguen a los consumidores en Bélgica”.
“Tales prácticas violarían las normas de competencia de la UE, porque les niegan a los consumidores los beneficios del Mercado único de la UE: elección y precios más bajos. AB InBev ahora tiene la oportunidad de responder a nuestras preocupaciones", ha añadido Vestager.
Anheuser-Busch InBev es la cervecera más grande del mundo, con una posición muy fuerte en el mercado belga de la cerveza. Sus marcas de cerveza más populares en Bélgica son Jupiler y Leffe. AB InBev también vende estas dos marcas en los Países Bajos y Francia. La investigación de la Comisión ha demostrado que en estos dos países AB InBev vende Jupiler y Leffe a precios más bajos que en Bélgica debido a la mayor competencia que enfrenta allí.
La opinión preliminar de la Comisión, expuesta en su pliego de cargos, es que AB InBev es dominante en el mercado belga de la cerveza. Alega que AB InBev ha abusado de esta posición de mercado dominante mediante la aplicación de una estrategia deliberada para evitar que los supermercados y mayoristas compren Jupiler y Leffe a precios más bajos en los Países Bajos y Francia, y que los importen a Bélgica.
En particular, a la Comisión le preocupan varias prácticas comerciales de AB InBev, que han estado vigentes desde al menos 2009. Así, explican que la compañía cambió el embalaje de las latas de cerveza Jupiler y Leffe en los Países Bajos y Francia para dificultar su venta en Bélgica: por ejemplo, eliminó el texto francés de sus latas en los Países Bajos, y el texto holandés de sus latas en Francia, a impedir su venta en las partes de habla francesa y holandesa de Bélgica, respectivamente.
Además, limita el acceso de los minoristas holandeses a productos y promociones clave, para evitar que traigan productos de cerveza menos costosos a Bélgica: por ejemplo, no vendió y / o limitó la cantidad de ciertos productos vendidos a minoristas holandeses y restringió la disponibilidad de ciertas promociones, si existiera la posibilidad de que los minoristas holandeses pudieran importar los productos a Bélgica.
La opinión preliminar de la Comisión es que estas prácticas han creado obstáculos anticompetitivos al comercio y han dividido el mercado único de la UE a lo largo de las fronteras nacionales. De confirmarse, esto infringiría el artículo 102 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea (TFUE) que prohíbe el abuso de una posición dominante en el mercado.