En la primera mitad de 2017, las importaciones españolas de vino han caído de forma significativa en volumen, hasta un 32,8% menos, hasta los 20 millones de litros y aumentaron un 2,5% en valor, hasta los 82,5 millones de euros, al aumentar el precio medio un 52,6% hasta los 4,12 euros por litro.
Estas cifras se explican por la caída de las compras de vino a granel, mientras crecen las importaciones de vinos con DOP envasados, según los datos del Observatorio Español del Mercado de Vino.
España importa, sobre todo, aromatizados de Italia y espumosos italianos y franceses. En concreto, Italia es el principal proveedor de vino a España en volumen y Francia lo es en valor.
En cuanto al saldo comercial del vino en España en el interanual a junio de 2017, es netamente favorable para España, alcanzando los 2.532,8 millones de euros, lo que supone una notable contribución del sector a la balanza comercial.