Las cadenas de distribución confían en la tecnología in store para conseguir el éxito de sus campañas (80%), evitar la rotura de stock (80%) y conseguir un alto estándar en experiencia de cliente (86%), según el estudio La tecnología en el punto de venta, promovido por Prodware.
El estudio analiza la adopción de nuevas herramientas en el comercio físico e identifica los retos y preocupaciones del sector. Se pone de manifiesto que la innovación es un aspecto estratégico para las compañías, tanto en operaciones, el 88% de las empresas manifiesta su importancia, como en productos y servicios, para el 70% de las compañías es un criterio destacable.
Por otro lado, mejorar la experiencia para el cliente es importante para el 87% de las compañías, la internacionalización también es relevante para el 59% de las empresas y un 50% de las mismas manifiesta que operar con canales on/off line integrados es un aspecto estratégico.
La tecnología se perfila, cada vez más, como un medio para conseguir que las empresas consigan sus objetivos estratégicos. El comercio minorista necesita, más que nunca, subirse al carro de la tecnología para hacer frente a los cambios disruptivos que enfrenta con las capacidades que únicamente las soluciones y herramientas tecnológicas son capaces de aportar.
Esto ha repercutido en los hábitos de los consumidores y ha favorecido la convivencia de múltiples canales que han hecho que el retail esté cambiando rápidamente y se enfrente a nuevos retos a los que dar respuesta. Estos desafíos se centran en tres ejes principales: el conocimiento del cliente, la omnicanalidad y la innovación en los procesos y operaciones.