La uva pasa es uno de los pocos cultivos que resiste la crisis. Las cifras que arroja la campaña estima una producción aproximada de 700 toneladas, el doble a la del año anterior, y una facturación de unos dos millones de euros.
Benjamín Faulí, técnico de Frutas y Hortalizas de la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (ASAJA) de Málaga, explica que los productores de uva pasa moscatel se enfrentan a una campaña en la que “los precios percibidos son la mitad de los que se recibieron la campaña pasada”. La lectura positiva viene de la mano de la producción ya que “este año se prevén 700 toneladas, una cantidad muy superior a la del año pasado, casi el doble”, asegura Faulí.
Los precios en el campo, según la calidad de la pasa, oscilan entre 10 y 30 euros la caja de 10 kilogramos, mientras que la campaña pasada el precio se mantenía entre 24 y 50 euros. Si los resultados finales no se alejan de las previsiones, la facturación rondará este año los dos millones de euros, según los datos de Asaja.
En Europa, los dos únicos países productores de uva pasa son España y Grecia. La producción griega ha decaído muchísimo, pues han pasado en apenas tres años de 16.000 toneladas a menos de 4. 400.
El mercado mundial esta dominado por Estados Unidos y Turquía, que están teniendo muy buenas cosechas. California produce entre 330.000 y 400.000 toneladas anuales, mientras que los empresarios turcos suman entre 280.000 y 300.000 toneladas. Argentina ha vendido este año 6.700 toneladas, con una facturación de 6,2 millones de euros, un 24% menos en valor que la campaña pasada. El precio, explica Faulí, “se ha resentido a nivel mundial”.