Desde el año 2000 una Directiva europea obliga a los comercios a indicar el precio de venta y el precio por unidad de medida, pero no todos los establecimientos la cumplen, según ha denunciado la OCU.
Esta organización explica que “un etiquetado correcto ofrece al consumidor la gran ventaja de poder comparar el precio por kilo de un pan de molde, por ejemplo, con otro de otra marca sin importar el tamaño o forma de presentación. Por eso no está de más que los supermercados se esfuercen en que los números que aparecen en las etiquetas sean las correctas”.
No obstante, OCU ya demostró en dos estudios, elaborados en 2003 y en 2011, que los supermercados no estaban etiquetando correctamente los productos que vendían, infringiendo la normativa que les obliga a indicar además del precio de venta de un producto su precio por unidad de medida o precio equivalente. Pero ¿qué ha pasado 6 años después? ¿Ha habido algún adelanto en la indicación de precios? ¿Hay mejora… o todo lo contrario?
Seis años después, esta entidad ha confirmado que los supermercados “siguen teniendo problemas en calcular la medida equivalente”.
En concreto, la OCU ha visitado 98 tiendas de 31 cadenas repartidas por 12 ciudades y ha recogido en total 9.165 precios de 10 tipos de productos de alimentación y droguería. Su estudio revela que el 23,3% de los productos analizados presentaba algún tipo de problema que impedía o falseaba su comparación con otros productos similares.
De este modo, de los 31 supermercados analizados, solo superan el 90% de precios correctos Consum, Eroski Center y Mercadona, que son los que mejor indican precios. En el otro extremo se encuentran Covirán (donde los problemas en los precios afectan a más de la mitad de los productos seleccionados para el estudio, y en más de un tercio ni siquiera aparece el precio equivalente), Spar y Bonpreu, explica la organización.
Respecto al resto de grandes cadenas, la OCU señala que hay bastantes diferencias: en Hipercor casi uno de cada tres productos presenta errores, y algo similar pasa con El Corte Inglés, Lidl y Alcampo, que abusan del redondeo. En Carrefour hay escasa visibilidad en precios equivalentes de droguería e higiene, y en DIA Market, que obtiene buenos resultados en general, más del 10% de precios tenían algún error de cálculo.
La organización pide, por un lado, más control interno y conocimiento de la normativa a los comerciantes y, por otro, un mayor control por parte de la administración para hacer cumplir esta norma.