Migueláñez presenta nuevos productos navideños que harán las delicias de todas las familias, especialmente de los mayores de la casa. Fiel a su deseo de integrarse en las tradiciones españolas, Migueláñez ha diseñado 12 jellies de la suerte para endulzar el paso al nuevo año a todos aquellos que no deseen tomar uvas.
Asimismo, ya están disponibles dos modelos de champaneras rellenas de bombones que pueden ser un regalo muy adecuado para estas fechas.
Migueláñez ha diseñado dos modelos de champaneras para celebrar la Navidad. Son envases transparentes con forma de cubitera en cuyo interior contienen 300 gramos de bombones de chocolate con cremoso relleno de avellana, o la misma cantidad de bombones rellenos de una cereza bañada en licor.
Una vez consumido el interior, el envase se puede utilizar como cubitera para los hielos, por lo que ambas champaneras se convierten en un regalo perfecto para estas fechas. Además, junto a los bombones, hay una botella de 20 cl. de cava Cordón Negro de Freixenet.
La tradición española de tomar las 12 uvas de la suerte el día 31 de diciembre acaba de cumplir 100 años. La implantación de esta costumbre se remonta a principios del siglo XX en nuestro país, y no se debe a motivos religiosos o culturales, sino más bien a intereses económicos. En la Nochevieja de 1909 los cosechadores de uva tuvieron una gran producción de esta fruta y para deshacerse de tanta uva inventaron el rito de tomar las uvas de la suerte en la última noche del año.
Actualmente la tradición se mantiene, pero no a todo el mundo le gusta tomar uvas para celebrar la llegada de un nuevo año, por ellos Migueláñez ha diseñado 12 jellies de la suerte con 10% de zumo, 0% materia grasa y aptos para celiacos porque no contienen gluten. Se pueden encontrar en dos formatos: en copa de plástico transparente que puede ser reutilizada para un brindis posterior; o en un original blíster transparente con forma de racimo de uva.