El 22% de los consumidores habituales de productos sin lactosa afirma que la falta de variedades de productos sin lactosa hace que compren y consuman productos no indicados para ellos.
De estos, el producto con lactosa más consumido por los intolerantes es el queso (comprado por el 40%), seguido del chocolate (33%), el pan de molde (33%), yogures (31%), helados (31%) y productos cárnicos (31%).
En este sentido, la mitad de los consumidores de productos sin lactosa afirma echar de menos algún producto en la oferta que actualmente puede encontrar mientras que solo el 29% dice estar satisfecho con la variedad existente, según el estudio que acaba de lanzar el departamento de estudios de mercado Shopperview de Aecoc “El comprador de productos sin lactosa”, de la mano de ADILAC, Asociación de Intolerantes a la Lactosa de España.
Por otro lado, el 17% de estos compradores y consumidores echa de menos variedades sin lactosa de queso; el 12%, variedades sin lactosa de bollería, pastelería y galletas; y el 10%, variedades de yogures.
Otros productos que también mencionan los participantes en el estudio entre aquellos que les gustaría incluir en su cesta de la compra en su variedad sin lactosa son platos preparados, productos cárnicos y embutidos, helados, postres y repostería, postres lácteos, chocolate y leche. No existe la percepción de que haya categorías por cubrir, pero sí se quejan de la falta de variedad de productos por escoger dentro del mundo sin lactosa.
Sin embargo, en general todos ven avances y ampliaciones en la oferta sin lactosa durante los últimos años y el producto que creen que está mejor logrado es la leche, tanto por lo que se refiere a su sabor como a su textura. Se aprecia su sabor dulzón y se consume tanto sola como con café o cacao. También valoran positivamente la entrada de nuevas marcas, además de las marcas de distribuidor, y el hecho de que haya más variedad de productos que en los últimos años.
Después de la leche, los productos sin lactosa con mayor incidencia de compra entre los consumidores de este tipo de productos son los yogures, quesos y postres lácteos. De todos modos, los consumidores señalan deficiencias en la variedad de sabores, formatos y texturas de los yogures sin lactosa, así como opciones de tipos y variedades de marcas de quesos.
Los productos que cuentan con una mayor planificación de compra son la leche -tanto para adultos como infantil-, la mantequilla, productos cárnicos y el pan de molde. Además, la leche, en las dos versiones señaladas, es el producto que más se compra para almacenar, mientras que otros como el pan de molde, postres lácteos o la mantequilla se compran más para su consumo inmediato.
Demanda de primeras marcas
Además, el consumidor demanda más productos sin lactosa de primeras marcas y no sólo de marcas especializadas. Así, de las entrevistas realizadas se desprende que los consumidores de productos sin lactosa reclaman que las marcas líderes, que generan mayor confianza y seguridad, se acuerden de ellos de manera que no se vean obligados a recurrir a productos de marcas especializadas o marcas blancas.
La compra de los productos sin lactosa se hace, en general, en los mismos establecimientos en los que se compran el resto de productos para el hogar: supermercados e hipermercados cercanos. En este sentido, la mayoría está satisfecha con su punto de venta habitual, aunque señalan una posible mejora en cuanto a precio y variedad, entre otros. La compra online de productos sin lactosa no está todavía extendida.