La cadena de distribución Bon Preu ha invertido 38 millones de euros en la primera fase del nuevo almacén de productos refrigerados, con el que se prevé doblar, en 10 años, la facturación de 1.077 millones de euros actuales.
Así, este nuevo almacén, con una superficie de 23.000 metros cuadrados, permitirá ampliar considerablemente la capacidad de gestión de los productos refrigerados, incrementar el número de referencias, tensar el flujo de suministros, mejorar la conservación de los productos con las últimas tecnologías disponibles, disminuir un 15% el kilómetros recorridos por los camiones que suministran a los puntos de venta, mejorar la movilidad urbana en las ciudades y reducir 600 toneladas las emisiones de CO².
El nuevo almacén está situado en la localidad barcelonesa de Balenyà, donde se encuentran las instalaciones logísticas del grupo. Con la puesta en marcha de este nuevo edificio, se trasladarán todos los productos refrigerados hacia las nuevas instalaciones y la superficie del antiguo almacén de carne, charcutería y fruta se añadirán al actual almacén de productos secos.
Con estas instalaciones, cuentan con 58.500 metros cuadrados de ciudad logística para suministrar las más de 25.000 referencias de productos que trabajan en los supermercados Bonpreu y Esclat. Esto permite gestionar más de 80 millones de cajas anualmente, generando un tráfico de entrada y salida de 150.000 camiones anuales.
Asimismo, prevén ofrecer 200 nuevos puestos de trabajo, preferentemente con diferentes perfiles de formación superior, e incorporar el máximo talento posible cuando el almacén esté a pleno rendimiento.