La Eurocámara respalda las medidas de apoyo al sector lácteo y ha exigido aumentar en 300 millones de euros las ayudas dentro del presupuesto de 2010, con el fin de contribuir a que los productores “salgan de la actual crisis”.
Por un lado, los eurodiputados han respaldado la intervención urgente de la Comisión en el mercado lácteo, así como el uso de las multas por exceso de producción para financiar la restructuración del mercado. Por otro lado, el pleno ha introducido enmiendas al presupuesto comunitario de 2010 con el fin de destinar 300 millones de euros al nuevo fondo de ayuda al sector lácteo.
El pleno ha apoyado las medidas de urgencia propuestas por la Comisión el pasado 19 de octubre, tras la adopción por el Parlamento de una resolución que exigía hacer frente a la crisis actual del sector lácteo.
Estas medidas de urgencia tienen dos objetivos: por una parte, permitir la intervención de la Comisión en el mercado, por medio del almacenamiento privado de productos lácteos, incluidos los quesos. Por otra, se busca financiar la reestructuración del mercado con parte del dinero procedente de las multas impuestas a los ganaderos que superan los límites de producción.
La comisaria de Agricultura, Mariann Fischer Boel explicó, durante una de sus comparecencias ante la comisión de Agricultura, que las medidas de urgencia podrían incluir el almacenamiento privado de distintos productos lácteos, incluidos los quesos, tal y como pidió el Parlamento en septiembre.
Los eurodiputados apoyan esta medida, pero exigen que se reconozca su carácter temporal y pueda aplicarse sólo hasta abril de 2010.
La segunda propuesta de urgencia de la Comisión tiene como objetivo asignar a los Estados miembros fondos suplementarios para apoyar la restructuración del mercado lechero.
En la actualidad, los países de la UE tienen la posibilidad de comprar cuotas de producción a los ganaderos que deciden abandonar definitivamente una parte o la totalidad de su producción lechera. En caso de que la producción nacional supere el límite fijado, los ganaderos que producen en exceso están obligados a pagar una multa que los Estados miembros deben destinar al presupuesto comunitario.
La modificación de las normas vigentes de cálculo de las multas permitiría que los países aplicasen sanciones económicas dentro de límites de producción más bajos. Esta modificación sólo podrá aplicarse hasta abril de 2010 y el los fondos adicionales que genere se destinarán a la restructuración del mercado de la leche.