La Comisión Europea ha anunciado que devolverá a los agricultores europeos, que reúnan las condiciones necesarias para recibir pagos directos, 465 millones de euros adicionales por la reserva de crisis no utilizada. A los agricultores españoles les corresponde 55,8 millones de euros.
Así, a partir del 1 de diciembre de 2016, España recibirá la cantidad más elevada de dinero de los países incluidos en la reserva de crisis, sólo superado por Francia y Alemania.
Como se acordó en la reforma de la PAC de 2013, cada año se deduce un importe pertinente de los pagos directos de los agricultores para crear una reserva anual de crisis agrícola. Puede movilizarse cuando el presupuesto anual no sea suficiente para financiar las necesidades de medidas de apoyo al mercado, como la intervención pública y el almacenamiento privado, y medidas excepcionales en situaciones de crisis. Si no se utiliza al final del año, esta reserva se devuelve a los agricultores.
Desde septiembre de 2015, la Comisión ha aportado más de 1.000 millones de euros adicionales en ayuda financiera al sector agrícola que se enfrenta a situaciones de mercado especialmente difíciles. Sin embargo, la Comisión y los colegisladores decidieron financiar este apoyo sin tocar la reserva de crisis para no afectar a los pagos directos recibidos por los agricultores.
Las medidas adicionales adoptadas, como la ampliación de las medidas de mercado existentes y la distribución de las dotaciones nacionales, se financiaron con las disponibilidades presupuestarias existentes en 2016, mientras que el último paquete de solidaridad a partir de julio de 2016 para los sectores lácteo y ganadero será financiado con cargo al presupuesto 2017.
El comisario europeo de Agricultura y Desarrollo Rural, Phil Hogan, declaró que "el año 2016 ha sido un año difícil para muchos agricultores y algunos sectores del mercado en particular, y me complace que la Comisión haya podido responder con una serie de medidas adicionales sin tener que activar este último recurso”.