Tras tres años consecutivos de descensos, el mercado de yogur y postres lácteos registró un aumento del 0,3% en valor en 2015, lo que supone un total de 1.860 millones de euros, en un contexto de leve incremento del volumen de consumo y ligera caída de los precios.
Esta evolución supuso una mejora respecto a la registrada en el año anterior, en el que retrocedió un 1,9%, según el estudio Sectores “Yogur y Postres Lácteos” publicado por el Observatorio Sectorial DBK.
El segmento de postres lácteos mostró un mejor comportamiento, al alcanzar la cifra de negocio de 440 millones de euros, un 2,3% más que en 2014. Por su parte, el valor del mercado de yogur se redujo un 0,4%, situándose en 1.420 millones de euros.
En el año 2015 tuvo lugar una recuperación de las exportaciones, que crecieron un 6,6%, alcanzando los 130 millones de euros. Por el contrario, el valor de las importaciones registró un sensible descenso, del 16,9%, hasta los 226 millones de euros.
Portugal se consolidó como el principal destino de las ventas al exterior, reuniendo el 77% del total exportado en 2015. Por su parte, el 58% de las importaciones provinieron de Francia.
Las previsiones para el bienio 2016-2017 apuntan a un suave crecimiento del valor del mercado, que crecerá alrededor de un 1% anual, aproximándose a los 1.900 millones de euros. El segmento de postres lácteos continuará mostrando una evolución más favorable que el conjunto del mercado. No obstante, el lanzamiento de nuevas variedades con efectos saludables y de nuevos formatos impulsará también el mercado de yogur.
El sector registra un alto grado de concentración, con aproximadamente 50 empresas, de manera que las cinco primeras empresas reúnen las tres cuartas partes del mercado, porcentaje que supera el 85% al considerar a las 10 primeras. En 2015, estas empresas generaron un volumen de empleo de 3.400 trabajadores, resultando una plantilla media cercana a los 70 trabajadores por empresa.