La cadena de distribución Caprabo abre un nuevo supermercado franquiciado en Tarrasa (Barcelona) que emplea a seis personas y tiene 300 metros cuadrados de superficie comercial. Por su parte, Lidl reabre su tienda de San Rafael en Málaga ampliando su oferta y sus instalaciones.
El nuevo establecimiento de Caprabo, el séptimo en esta población, tiene una gran oferta de productos por metro cuadrado y cubre el máximo de necesidades de consumo. Con el modelo franquiciado, Caprabo incide en el supermercado de proximidad, incrementa los servicios al cliente, cubre la mayor cantidad de necesidades de consumo por metro cuadrado, manteniendo la calidad, la capacidad de ahorro y la personalización.
El establecimiento de Lidl contará con un centenar de nuevas referencias en productos frescos, la mitad de pan y bollería horneada, hasta las 1.850. La plantilla de la tienda se incrementará un 40% con la incorporación de cinco nuevos empleados.
El establecimiento contará con una sala de ventas de más de 900 metros cuadrados y con el objetivo de mejorar la accesibilidad de las instalaciones, Lidl ha ampliado el solar en un 50% y ha duplicado las plazas de aparcamiento hasta alcanzar las 115.